En medio de la frenética actividad comercial que caracteriza la temporada de Buen Fin en México, que este año se llevará a cabo del 17 al 20 de noviembre, surge una tendencia notable: la proliferación de ofertas basadas en meses sin intereses en lugar de descuentos directos en productos.
“El 80% de los descuentos del Buen Fin están dirigidos a los meses sin intereses, ya son de cajón, mientras que descuentos reales de un porcentaje marginal y que realmente sea algo en que, pongamos que la cadena y el proveedor pierden al hacer descuento, es menos del 20% en las mercancías”, apuntó Jorge Quiroga, director general de Retailer.
Lo anterior hace sentido cuando el estudio de la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO), arrojó que la desconfianza en promociones es la principal razón para no participar en la campaña de descuentos que tendrá su décimo tercera edición.
El estudio apuntó que 45% de los consumidores omnicanales no confía en las propuestas de descuentos de las empresas participantes, seguido por un 25% que no comprará debido a la situación económica, y 24% prefiere esperar a otro tipo de promociones y ofertas.
“A pesar de que notábamos crecimiento muy paulatino de personas que estaban dispuestas a gastar en el Buen Fin que el año pasado rondó en 47, ahora bajó a 37%, y la razón son que no tienen dinero, hay otros gastos, y que no confían”, expresó Iván Castro, el director de Planning Quant.
Tradicionalmente, los consumidores han asociado el Buen Fin con descuentos tentadores que buscan atraer a compradores ávidos de ofertas, con esa idea nació hace 13 años, para reactivar la economía y como una copia al Black Friday de Estados Unidos, la realidad es que en tierra azteca jamás se ha replicado en esa misma magnitud.
“En México, el Buen Fin no ha tenido la misma percepción porque los descuentos no han sido tan agresivos, y han sido más de págame a plazos, en lugar de que las empresas y proveedores o fábricas sacrifiquen un poco, ofrecen descuentos marginales, entonces realmente, hasta que no entendamos bien, qué son los descuentos agresivos”, dijo Quiroga.
La decisión de favorecer los meses sin intereses sobre los descuentos directos puede estar vinculada a la creciente conciencia financiera entre los consumidores mexicanos, ya que muchos prefieren la comodidad de pagar a plazos, permitiéndoles gestionar mejor sus gastos.
“El 80% de los usuarios reportó que, cuando hay una opción de compra ahora y paga después son mucho más propensos a terminarla compra o comprar algo más, que no es lo que estaban buscando, y esto es con la tarjeta de crédito”, apuntó Alex Wieland, director de operaciones y cofundador de Aplazo.
Datos de la AMVO arrojan que será un Buen Fin endeudado, ya que 76% prevé usar la tarjeta de crédito como método de pago, principalmente aquellos entre 25 y 34 años; seguido por la de débito con 59%, departamentales con 36%, efectivo con 15% y 10% en compra a plazos sin tarjeta como Aplazo, Kueski, Mercado Crédito, entre otros.
Para los canales digitales como Mercado Libre, Amazon, y los market places de Liverpool, Suburbia y Walmart, esta última que tiene su propia campaña de Fin Irresistible, es más sencillo dar descuentos reales, porque no enfrentan la presión de costos operativos que una tienda.
“Es parte de una estrategia, porque no gastan en las tiendas físicas, operación de caja, seguridad, prevención de pérdidas, inventarios físicos, entonces para el marketplace es una gran inversión el Buen Fin”, refirió Quiroga.
Mercado Libre compartió que tiene un algoritmo de credibilidad, que es inteligencia artificial que monitorea los precios para que cuando llega el Buen Fin puedan asegurar descuentos reales.
“Está siempre encendido, monitoreamos los precios de tiempo atrás a la campaña, para poder asegurar los descuentos, todo va dependiendo de la categoría y el producto, y lo que sí sucede es que dependiendo el día, la demanda y las variables que se va comportando el día a día”, explicó María Fernanda Zuccolotto, gerente de relaciones públicas de Mercado Libre en México.
Se espera que este año la venta digital del Buen Fin represente 27%, cuando el año pasado aportó el 18%.