Porque es el segundo tema más importante para los mexicanos, por encima del desempleo y la pobreza
Cerca de 200 millones de pequeños actos de corrupción se registraron en México durante 2015, de acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
De esa magnitud es el problema en nuestro país, y a propósito de que este viernes 9 de diciembre es Día Internacional Contra la Corrupción te decimos qué opinan los mexicanos.
En México la corrupción se reconoce como el segundo problema más importante de todos (51%), solo por debajo de la inseguridad (66%), de acuerdo con la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG) del Inegi.
De acuerdo con este mismo estudio, este problema es un asunto más delicado que el desempleo, la pobreza e incluso la salud y la educación.
¿PROBLEMA CULTURAL?
"La corrupción es un problema para todos los países y en muchas ocasiones, un tema de carácter cultural", así lo definió el presidente Enrique Peña Nieto hace dos años.
De acuerdo con la 5 Encuesta Nacional de Cultura Política y Prácticas Ciudadanas de la Secretaría de Gobernación, los ciudadanos consideran que se deben desobedecer las leyes si se consideran injustas (47%) frente al 37% que piensa que debe obedecerlas aun cuando sean injustificadas.
Además de esto, de acuerdo con el Índice de Corrupción y Comportamiento Ético elaborado por FTI Consulting, el 36% de los empresarios admitió que al interior de su organización ha experimentado fraudes, robos, corrupción o fugas de información por parte de empleados, gerentes o directivos.
¿POR QUÉ SOMOS CORRUPTOS?
De acuerdo con el Índice de Competitividad Internacional 2015 del Imco, los emprendedores mexicanos reconocen que la corrupción es conveniente en los siguientes casos:
1. Para facilitar trámites. 57% de los empresarios utilizan gestores con acceso a privilegios o información. Un ejemplo son los llamados "coyotes" en las dependencias donde se deben hacer trámites burocráticos.
Ayúdanos a ayudarte a dejar de usar esta frase cuando andes en broncas. pic.twitter.com/Rssf03MaJl
— Corrupcionario (@corrupcionario) December 8, 2016
"Las oportunidades de corrupción se dan a granel por el número de trámites a seguir en la apertura de un negocio y posteriormente gracias a las inspecciones que diversas dependencias están autorizadas para realizar en los establecimientos:sanitarias, fiscales, de medio ambiente, etc.", dice el Imco en su reporte Anatomía de la corrupción 2016.
2. Ofrece oportunidades. El 45% de los empresarios reveló que el gobierno les ha solicitado un soborno para la obtención de un contrato u oportunidad de negocio.
"El contacto con alguna autoridad gubernamental siempre abre la oportunidad para engancharse en un acto de corrupción. Las dos avenidas más comunes para la complicidad entre autoridad y empresa son la de la regulación y la del contratismo o asociaciones público-privadas", de acuerdo con el Imco.
3. Da ventaja sobre competidores. 34% de los emprendedores considera difícil ser una empresa exitosa sin conexiones políticas.
Este tipo de corrupción se identifica como la colusión, en el que "conexiones cercanas" entre empresas y políticos ayudan a realizar arreglos para evadir o desviarse de normas. Es una forma de posicionarse mejor respecto a otra empresa.
Asimismo, el 63% de los empresarios considera que la corrupción forma parte de la cultura de negocios en México.
¿SE PUEDE SOLUCIONAR?
El Banco Mundial contempla que en nuestro país la corrupción genera perdidas de 9% en el Producto Interno Bruto.
Ante ello, organizaciones no gubernamentales como el Imco han estudiado el problema y presentado algunas posibles soluciones.
1. Cambios en las instituciones. Al órgano de persecución se le debe dar pleno acceso a los sistemas interconectados de información financiera y fiscal. Esto debe incluir al Sistema de Administración Tributaria (SAT), la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Compranet, las autoridades financieras y las declaraciones patrimoniales y de conflicto de interés como la llamada #Ley3de3.
Asimismo, se deben homologar los códigos penales estatales para delitos de corrupción y armonizar las leyes estatales con la nueva ley de transparencia.
2. Tomar en serio el combate a la corrupción. En Hong Kong, por ejemplo, la institución encargada del combate a la corrupción se conforma por 1,415 personas; en Singapur está conformada por 88 personas; sin embargo, en México la Unidad Especializada en Investigación de Delitos Cometidos por Servidores Públicos y contra la Administración de Justicia solo tiene 12 personas.
3. Limitar los compadrazgos, amiguismos y favores. Capacitar a los ministerios públicos en funcionamiento del Sistema Nacional Anticorrupción e impulsar el servicio profesional de carrera ya que estos representan apenas 6% de la administración pública federal y solo 3% concursan públicamente.
4. Uso de tecnología y reducir el efectivo. En el gobierno se deberían realizar todos los pagos de nómina, proveedores y obra pública por medios electrónicos. Además, la entrega de programas sociales se tendría que hacer mediante tarjetas de débito, monederos electrónicos o transferencias móviles.
Juan Pardinas, director del Imco, asegura que con este tipo de medidas, Argentina logró reducir 12 veces los reportes de soborno en programas sociales.
