Porque se trata de un caso que estremeció a todo México
La mamá de Norberto Ronquillo, joven que fue secuestrado el martes pasado y encontrado muerto en Xochimilco este 10 de junio, explicó que su exigencia de justicia no es una situación política en contra de Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno o Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.
"Me hablan y me dicen: '¿quieren que renuncie la jefa de gobierno? ¿el presidente?' No se trata de eso (...) no podemos dejarle al gobierno todo, también como ciudadanos como padres, cada quien en nuestra casa (...), las autoridades por más cosas que hagan si todos los niños que vienen en el futuro vienen sin bases, vienen sin moral, ellos lo van a seguir haciendo".
«Norelia Hernández»
En conferencia de prensa, Norelia Hernández, madre del joven, dijo que aunque está consiente de que existe mucha negligencia y que las cosas pueden mejorar, eso no fue de lo que habló ni con la jefa de gobierno ni con Ernestina Godoy, procuradora de la CDMX, durante su reunión del día de ayer.
#ENVIVO: "Yo no le deseo el mal a nadie": Norelia Hernández, madre de Norberto Ronquillo https://t.co/QBrFKvfCCc
— Milenio.com (@Milenio) 11 de junio de 2019
De acuerdo con ella, lo que hizo en ese encuentro fue alzar la voz por "todas las Norelias, por todos los Norbertos" y señaló que lo importante es saber qué pasará ahora, "quién va a hacer que todo funcione mejor, que todo se agilice".
Sin embargo, recordó que no puede dejarse toda la tarea a la ciudad o al gobierno, sino que "todos tenemos que hacer algo,todos en nuestra casa", y recalcó que no se trata de pelear con el gobierno sino de "juntos echarnos la mano".
Además, agradeció a las autoridades porque se les ha dado todo el respaldo.
Fuente: Cuartoscuro
"Yo pedí que me entregaran a mi hijo (...), ellos me lo entregaron, ahorita me están dando el apoyo de atención a víctimas, apoyo de todo tipo", puntualizó Hernández.
Finalmente, pidió que no rezaran ni por ella ni por Norberto, sino por las personas que tienen "lastimados sus corazones" y afirmó que no le desea a nadie el dolor que está sintiendo, ni siquiera a los secuestradores que acabaron con la vida de su hijo.