Porque el presidente de Morena encabeza las preferencias del electorado rumbo a 2018
Llevar a la práctica las propuestas que Andrés Manuel López Obrador plasma en su más reciente libro, “2018, la salida”, le costarían al país más de un billón de pesos.
La propuesta más costosa es la construcción de dos nuevas refinerías, una en Tabasco y otra en Campeche. De acuerdo con cálculos de la Secretaría de Energía, el proyecto de la refinería que se construiría en Tula, Hidalgo, y que finalmente fue cancelado en 2014, tendría un costo aproximado de diez mil millones de dólares; es decir, tomando este mismo costo para las que se proponen en el libro, la inversión necesaria sería de unos 420 mil millones de pesos, tomando 21 pesos por dólar como tipo de cambio.
López Obrador también propone la reconfiguración de tres refinerías: la de Tula, Hidalgo; la de Salina Cruz, en Oaxaca, y la de Salamanca, en Guanajuato. De acuerdo con cifras de Pemex, las más recientes reconfiguraciones de las refinerías de Salamanca y Ciudad Madero tuvieron un costo de entre 600 y 800 millones de dólares cada una.
Así, la reconfiguración de las tres refinerías que propone el tabasqueño representarían una inversión, tomando los mismo 21 pesos por dólar, de 50 mil 400 millones de pesos.
Además se plantean otras inversiones en diversos rubros, como obras, becas, salarios y apoyos a la población que en conjunto, según los cálculos del propio López Obrador en su libro, ascenderían a 550 mil millones de pesos, por lo que, realizando la suma de todas estas cantidades, el resultado es un billón 20 mil 400 millones de pesos.
En el libro, el excandidato presidencial establece dos vías para obtener esos recursos: el primero, “acabar con la corrupción”, con lo cual, asegura, el país contaría con poco más de 500 mil millones de pesos y; el segundo, “con la inversión de capitales semilla”, con lo que se obtendrían de la Iniciativa Privada inversiones de aproximadamente el triple de lo que el gobierno destine a estas inversiones productivas.
LAS INVERSIONES
Un ejemplo de los rubros a los que destinaría grandes cantidades de recursos el dirigente nacional de Morena, es su programa para reforzar a Pemex y a la CFE: en el que se invertirán 80 mil millones de pesos –para las dos–, adicionales a los presupuestos con los que cada una de estas empresas del Estado cuenta.
En otro rubro, el exjefe de Gobierno señala que “los proyectos orientados a reactivar la economía y crear empleos obtendrán un respaldo de inversión pública de alrededor de 220 mil millones de pesos, adicionales al presupuesto actual destinado a la vivienda, a obras y servicios públicos, a comunicaciones, al fomento de la pequeña y mediana empresa, al turismo, a mejorar el salario, a fortalecer el consumo y el mercado interno”.
Los apoyos adicionales se darían en la industria de la construcción, donde destacan la construcción de nuevas carreteras, dos pistas en la Base Aérea de Santa Lucía (con lo que se cancelaría el proyecto del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México y del cual no toma en cuenta el dinero que por concepto de penalización se tendría que pagar a las empresas que lo construyen), la construcción de trenes de gran velocidad que irían de la Ciudad de México a las principales ciudades de nuestra frontera norte, además del proyecto del tren del sureste.