Porque algunos políticos quieren hacer esto realidad
¿Qué pasaría si en México la elección presidencial tuviera dos rondas?
La propuesta de una segunda vuelta electoral ha cobrado fuerza tras los recientes resultados del 4 de junio, donde algunos de los ganadores obtuvieron apenas el 30% de la votación popular.
Ricardo Anaya, presidente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), dijo este martes que es "urgente" legislar la segunda vuelta en la elección presidencial para fortalecer el sistema democrático mexicano y evitar una "crisis de legitimidad".
Sin embargo, el tema no es nuevo ni tan sencillo y esto es lo que dicen algunos especialistas sobre la posibilidad, en el papel, de dotar de mayor representatividad al próximo presidente de México.
¿BENEFICIADOS?
Para empezar, hay que recordar que, en términos generales, la segunda vuelta considera que si ningún candidato obtiene el 50% más uno de los votos en una elección, entonces se realizará una segunda votación pero solo entre los dos aspirantes que hayan obtenido el mayor número de sufragios.
Para Carlos Bravo Regidor, académico del CIDE, los blanquiazules serían claramente los beneficiados si esta reforma electoral se aprueba antes de la elección presidencial del próximo año.
"El mayor beneficiario de una segunda vuelta en México sería el PAN (...) Le convendría porque algunos sectores importantes del electorado quieren un cambio con estabilidad, que en muchos sentidos se recupere continuidad: un 'cambio conservador'"
El diputado federal panista, Jorge Triana, comentó en entrevista que las reglas están hechas para todos y una eventual segunda vuelta obligaría a los partidos a convencer al electorado con sus propuestas y si pasan a segunda ronda estarían también obligados a hacer acuerdos con el resto de fuerzas políticas.
Sin embargo, el investigador del Instituto Belisario Domínguez del Senado, Raúl Zepeda, considera que "no necesariamente" hay un ganador claro. El también académico y autor de un estudio específico del tema, explicó que aún es muy apresurado considerar que el ganador sería el PAN, aunque adelantó que con base en las encuestas el partido beneficiado sería quien tenga, en el momento de la elección, menores niveles de negativos.
LOS PERDEDORES
El académico del ITAM, Horacio Vives, considera que la elección del próximo año será "un escenario muy parecido" a 2006. "Vas a querer que llegue AMLO o vas a estar en contra (de él)".
Por eso, el especialista en Ciencia Política dice que en 2018 veremos una elección "plebiscitaria", donde habrá gente que apoye al líder de Morena, pero también se puede formar un bloque para impedir que López Obrador llegue a la presidencia. "Si bien falta un año, creo que tal vez esa es la apuesta de muchos de los actores".
Aunque Vives explicó que intentar legislar sobre este tema le metería más complicaciones a la ya de por sí complicada elección de 2018.
Carlos Bravo Regidor, del CIDE, coincide sobre el tema de López Obrador.
El especialista detalló que el líder de Morena había sido más moderado "precisamente para tratar de acercarse y ganar el voto del electorado conservador", pero en las últimas semanas, según el académico del CIDE, esa imagen que estaba construyendo "ya se fue al caño" al ver a un López Obrador que no concilia, que dinamita y confronta.
Pero Carlos Bravo también añade otro posible perdedor: el PRI.
"Hay una dedicatoria en dos sentidos: Estando como está el PRI, terminaría por aniquilar las pocas probabilidades que tiene para hacerse de la presidencia. Y segundo, si la segunda vuelta se diera entre AMLO y el PAN, le convendría al PAN"
Raúl Zepeda, del Instituto Belisario Domínguez, consideró que ahora Morena y el PRI podrían ser los perjudicados, ya que en general los que partidos que tienen mayor calificación negativa son los menos beneficiados.
"Hoy puede ser un partido, pero para julio de 2018 no tenemos idea. Están subestimando al votante", comentó en entrevista.
¿ES VIABLE PARA 2018?
Horacio Vives explicó que por cuestiones legales una vez que empiece el proceso electoral es imposible la reforma. "Vería complicado que en estas semanas se juntara la comisión permanente y expidiera una legislación que afectara de tal magnitud las condiciones del juego". El profesor del ITAM no ve condiciones políticas para que eso ocurra.
De hecho, Morena y el PRI se han manifestado en contra de esta propuesta.
En ese mismo sentido, el especialista Raúl Zepeda detalló que para hacer viable la segunda vuelta se deberían reformar conceptos de la legislación en materia de anulación de elecciones, materiales electorales, fiscalización de campañas, entre otros temas. A su juicio se trata de una implementación técnica compleja.
"En general se puede hacer, pero reformar el sistema electoral al cuarto para las doce es problemático. Las autoridades no tendrán capacidades para doble carga administrativa sin una ampliación presupuestal. Lo que se pide ahora son recortes, es paradójico. Es una propuesta un tanto imprudente en ese sentido"
El senador afín al bloque de Morena y el PT, Miguel Barbosa, comentó que el artículo 105 de la Constitución establece que las leyes electorales que serán aplicadas en una elección deberían estar vigentes al menos 90 días antes del inicio oficial del año electoral, por lo que en este año ya sería inviable.
Aunque el PAN considera que si bien los tiempos están muy apresurados, sí podría darse la reforma.
"Ciertamente los tiempos están apretados, forzados, tendríamos que tenerla lista antes del inicio formal del proceso electoral en septiembre. Con voluntad de todas las fuerzas políticas todavía podría salir", comentó el panista Jorge Triana.
Sin embargo, con tiempo o sin tiempo, el profesor del CIDE, Carlos Bravo Regidor, comentó que en este momento se trata de una falsa solución. "El foco, el énfasis, debería estar en restaurar la integridad de los procesos electorales y en que las elecciones sean limpias y las instituciones electorales tengan la confianza de los ciudadanos.
