Porque todo el país, y en especial Sonora, exige justicia
Esta temporada, los exgobernadores están en la mira de la justicia. Por ejemplo, el nuevo gobierno de Quintana Roo ya demandó al exmandatario Roberto Borge, mientras que el veracruzano Javier Duarte sigue prófugo.
Pero el que ya está tras las rejas es el exgobernador de Sonora, Guillermo Padrés Elías. Checa lo mal que le fue al panista en exactamente una semana.
SU REGRESO
El pasado jueves 10 de noviembre, Guillermo Padrés Elías reapareció públicamente. En un programa de radio, el sonorense anunció que se entregaría a las autoridades para rendir su declaración y presentar pruebas a su favor ante una orden de aprehensión que un juez giró en su contra.
El exgobernador de Sonora se presentó ante las autoridades acompañado de su hijo, Guillermo Padrés Dagnino, quien formaba parte de su equipo de abogados. Cuando salían del juzgado 12 del Reclusorio Oriente, el hijo de Padrés fue detenido y trasladado al penal de “El Altiplano”, en el Estado de México, mientras que el exgobernador se quedó en el Reclusorio Oriente a disposición del juez.
El abogado de la familia Padrés, Antonio Lozano, acusó que Guillermo Padrés Dagnino fue detenido irregularmente, pues no se le notificó sobre la orden de aprehensión por la que fue detenido y estaba incomunicado.
SE QUEDAN
El miércoles 16 de noviembre la situación jurídica del exgobernador de Sonora se decidió. El Juzgado 12° de Distrito de Procesos Penales Federales con sede en el Reclusorio Oriente dictó auto de formal prisión en contra de Guillermo Padrés Elías por los delitos de lavado de dinero y defraudación fiscal equiparada por 8.8 millones de dólares.
Ese mismo miércoles, el Juzgado 4° de Distrito de Procesos Penales Federales con sede en penal “El Altiplano” del Estado de México, emitió otro auto de formal prisión contra el exgobernador de Sonora, por lavado de dinero y delincuencia organizada.
De acuerdo con esta segunda orden de aprehensión, durante la administración de Padrés Elías en Sonora (2009 y 2014), se realizaron “licitaciones a modo” que entregaron contratos por 260 millones de pesos a un grupo de empresas vinculadas a la familia Padrés. Los recursos provenientes del gobierno de Sonora fueron depositados en las cuentas bancarias de dichas empresas, y luego fueron transferidos a una cuenta concentradora, de la cual uno de sus titulares es Guillermo Padrés Dagnino, el hijo del exgobernador.
Para rematar, también el miércoles por la noche, el Juzgado 4° de Distrito de Procesos Penales Federales dictó auto de formal prisión contra Guillermo Padrés Dagnino, el hijo del exgobernador sonorense, por los delitos de operaciones con delitos de procedencia ilícita y delincuencia organizada.