Elementos de la Policía de Investigación (PDI) de la Fiscalía Capitalina detuvieron a Alberto Batlea “El Batlia”, uno de los delincuentes más buscados en toda la metrópoli pues era considerado “El Rey de la Piedra” o "El Heisenberg" de la CDMX pues instaló varios narcolaboratorios en la capital para fabricar droga sintética.
De acuerdo con las indagaciones, las sustancias producidas eran vendidas a grupos criminales de la Unión de Tepito, Cártel de Tláhuac y Los Rodolfos, además de surtir droga a cárceles de la Zona Metropolitana.
Según El Universal, si bien mantuvo un “bajo perfil”, a las autoridades locales y la Secretaría de Marina les preocupó el poder adquisitivo que ganaba “El Batlia” vendiendo su droga sintética y el respeto que ganó entre los cárteles locales, por lo que se ganó el apodo de “El Heisenberg” de la CDMX, con referencia a la serie televisiva, Breaking Bad.
Hasta el momento, las autoridades no han informado de manera oficial sobre la captura del presunto líder criminal, quien habría sido detenido el miércoles 31 de agosto, junto con su esposa y su sobrino, durante un cateo en la alcaldía Iztapalapa.
“Batlea” es considerado un ‘pez gordo’ en el submundo del hampa de la megalópolis, y de acuerdo con el periodista especializado en crimen y narcotráfico, Antonio Nieto, proviene de una familia de ex policías.
Él mismo se habría desempeñado como policía judicial, pero en el 2000 fue destituido y se convirtió en narcotraficante. Según el autor del libro “Narco CDMX: El monstruo que nadie quiere ver”, editado por Grijalbo, se trata de uno de los narcos más buscados de los últimos años.
