Responsables de la procuración de justicia en la Ciudad de México y, con ello, de hacer valer la Ley, garantizando el bienestar de las y los capitalinos, los procuradores que ha tenido la capital del país se han visto envueltos en más de una polémica, al igual que la fiscal, Ernestina Godoy Ramos.
Justamente ayer, Ernestina Godoy, primera fiscal de la Ciudad de México y última procuradora de la capital del país, ya que en 2020 le tocó el cambio de responsabilidades de este organismo, fue 'puesta en pausa' en su intento por ratificarse y extender su gestión en medio de una polémica y política batalla entre los diputados del Congreso de la Ciudad de México.
Pero eso no es lo único que la ha puesto en la mira, ni a ella, ni a sus antecesores. En Nación321 te contamos algunos casos.
La hoy fiscal de la Ciudad de México, Ernestina Godoy, llegó a su cargo en diciembre de 2018. Para el 10 de enero de 2020 su puesto cambió de nombre, pues la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México pasó a ser Fiscalía.
Con este hecho, ella se volvió 'histórica', al ser la última y primera mujer en presidir esos órganos.
Entre las polémicas que su administración arrastra, están un presunto espionaje político, revelado el 9 de noviembre pasado por The New York Times.
En un reportaje, el medio estadounidense acusó que la empresa Telcel entregó a la Fiscalía General de Justicia de la CDMX, registros telefónicos de opositores a Morena, como la senadora Lilly Téllez y el exalcalde la Benito Juárez y precandidato a jefe de Gobierno capitalino, Santiago Taboada, quien dicho sea de paso, ha acusado persecución política en su contra, por parte de la fiscal.
Además, a inicios de este año, el Congreso de la CDMX aprobó la llamada 'Ley Godoy', para que la fiscal pudiera reelegirse en su puesto y quedarse otro periodo de cuatro años, con mayor facilidad, de entrada.
Un tropezón más ocurrió en octubre de 2020, cuando Alejandra Cuevas fue detenida y llevada al penal de Santa Martha Acatitla, acusada del fallecimiento de Federico Gertz, hermano del Fiscal General de la República (FGR), Alejandro Gertz.
Alejandra estuvo recluida por más de año y medio, hasta que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) intervino y concluyó que fue incorrecto atribuirle el fallecimiento de Federico Gertz.
Rodolfo Ríos Garza fue procurador general de Justicia de la capital del país del 5 de diciembre de 2012 al 24 de junio de 2017, durante la gestión de Miguel Ángel Mancera como jefe de Gobierno.
Abogado de profesión, Ríos Garza renunció al cargo de procurador en medio de una polémica desatada por la forma en que la entonces fiscalía trató dos casos: el multihomicidio de la Narvarte y el feminicidio de Lesvy Berlín.
El caso Narvarte fue un el multihomicidio ocurrido en esa colonia de la Ciudad de México, que ocurrió el 31 de julio de 2015. Ahí fueron asesinados el fotoperiodista Rubén Espinosa Becerril, la activista Nadia Vera, la modelo Mile Virginia Martín, la maquilladora Yesenia Quiroz y la trabajadora doméstica Olivia Alejandra Negrete.
Aunque hubo detenidos por el caso, la familias de las víctimas nunca llegaron a saber a ciencia cierta qué motivó el asesinato de su familoares, pues las versiones de la procuraduría de Ríos Garza no los convencieron, además acusaron impunidad y faltas a los derechos humanos.
En tanto el caso de Lesvy Berlín, joven universitaria de 22 años de edad, fue la gota que derramó el vaso.
La estudiante fue encontrada muerta el 3 de mayo de 2017 en el Instituto de Ingeniería de la UNAM. Debido a que tenía el cable de una cabina telefónica atado a su cuello, omitiendo los signos de violencia que su cuerpo presentaba, la Procuraduría consideró en primer lugar que la joven se suicidó.
Tras una intensa lucha de colectivos feministas y su madre, fue hasta 2019 que su novio José Luis González fue declardo culpable de feminicidio.
Fundador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Samuel Del Villar fue procurador general de justicia del Distrito Federal del 5 de diciembre de 1997 al 4 de diciembre de 2000.
La mayor polémica que enfrentó en su gestión fue el asesinato del conductor de televisión Paco Stanley, ocurrido el lunes 7 de junio de 1999, en el restaurante El Charco de las Ranas, al sur de la capital del país.
Durante las indagatorias del asesinato, Del Villar mantuvo una relación áspera con los medios de comunicación, por las críticas que recibía por su trabajo y, de paso, el del entonces jefe de gobierno del Distrito Federal, Cuauhtémoc Cárdenas.
Lo más polémico, fue que la procuraduría de del Villar hizo una reconstrucción del caso con base en supuestos culpables, que dos años más tarde fueron declarados inocentes, a falta de pruebas..