Porque las mascotas también necesitan cuidados
La mala calidad del aire en la Ciudad de México puede afectar tu salud... y la de tu mascota. Ante esto, ¿qué se debe considerar para su cuidado?
Este martes y miércoles, la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) activó la contingencia ambiental por ozono y mantuvo la contingencia ambiental por partículas menores a 2.5 micrómetros (PM 2.5) en la Zona Metropolitana del Valle de México, según informó la Secretaría del Medio Ambiente capitalina.
Al igual que a las personas, animales de compañía como perros y gatos pueden presentar síntomas de irritación en los ojos y vías respiratorias.
Ylenia Márquez, académica del departamento de Medicina, Cirugía y Zootecnia para Pequeñas Especies de la UNAM, explicó este martes que algunos perros o gatos tienen mayor predisposición a ser afectados por los niveles de contaminación en el ambiente.
Un ejemplo de esto son los animales braquicéfalos, como los perros Bulldog francés o inglés, los pekineses, los Bóxer o los Shar pei, entre otros. En esta categoría entran también los gatos Persas y los Himalayos.
La doctora Márquez indicó que las recomendaciones durante una contingencia ambiental son las mismas para las personas que para sus mascotas.
En entrevista con El Financiero, la especialista en perros y gatos explicó que los animales atrapan pequeñas partículas al respirar y las eliminan por la secreción mucosa. Sin embargo, en los braquicéfalos esta eliminación no es adecuada de por sí, por lo que ante una contingencia pueden exacerbarse signos como estornudos, secreción nasal e incluso problemas para respirar.
"Los braquicéfalos tienen defectos en las vías respiratorias. Estas razas tienen además los ojos más expuestos. Por lo mismo, están más expuestos a irritantes ambientales y hay que tener cuidado", comentó.
Por esto, lo recomendable es evitar hacer ejercicio extenuante al aire libre y pasar tiempo fuera. También hay que procurar que las mascotas se encuentren en un lugar fresco dentro de la casa, con agua y comida limpia. "Si dejamos sus platos de agua o comida afuera, pueden ingerir partículas contaminantes", añadió.
"Hay que mantenerlos en ambientes controlados con aire acondicionado y ventanas cerradas. Pero si por el calor que se ha registrado se tienen las ventanas abiertas, lo mejor es procurar que estén en un lugar más aislado", explicó.
La académica de la UNAM también recomienda limpiar el pelaje de las mascotas con un trapo húmedo para evitar que las partículas contaminantes se queden adheridas a ellos.
Sobre los canarios, otra mascota común, comentó que las aves en general son también muy susceptibles a contaminantes ambientales. "Recomiendo no tenerlos en áreas descubiertas. Si se pueden resguardar en un área cerrada, mejor, y atender a cualquier irritación en ojos y vías respiratorias".
¿QUÉ SÍNTOMAS DEBEN PREOCUPARTE?
"En los ojos puede presentarse lagrimeo constante. Hay razas predispuestas, pero si se exacerba ya hay que asistir al veterinario. Si están con ojos irritados o se los quieren tallar, si tienen secreciones o estas cambian de color, si tienen muchos estornudos o si presentan dificultad para respirar, son signos que ya deben de preocupar", advirtió la veterinaria.
Los altos niveles de contaminación atmosférica pueden ocasionar en las personas enfermedades cardiovasculares, respiratorias y padecimientos de la vista.
Si bien los animales no pueden verbalizar sus molestias, es importante tomar en cuenta que, si te arden los ojos, puede que a tu perro o gato le pase lo mismo, concluyó Márquez.
