En los últimos días, el laboratorio AstraZeneca generó polémica al reconocer que su vacuna contra COVID-19 puede ocasionar, en circunstancias muy excepcionales, trombosis, por lo que entre las y los usuarios de redes sociales comenzaron a alarmarse y a preguntar por el tratamiento.
De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), existen dos tipos de trombosis:
A pesar de que son condiciones graves, son prevenibles.
¿CUÁL ES EL TRATAMIENTO?
Los CDC de Estados Unidos aseguran que existen fármacos destinados a prevenir y tratar la trombosis venosa profunda.
Las medias de compresión a menudo se recomiendan para prevenir esta condición y aliviar el dolor y la inflamación. En algunos casos, puede ser necesario utilizarlas durante 2 años o más después de padecerla enfermedad. En situaciones graves, la cirugía puede ser necesaria para extraer el coágulo.
Para la embolia pulmonar, se requiere atención médica inmediata. En casos de que sea grave, existen medicamentos llamados trombolíticos que pueden disolver el coágulo.
También se pueden prescribir otros fármacos, conocidos como anticoagulantes, para prevenir la formación de coágulos en el futuro. Es posible que algunas personas necesiten tratamiento a largo plazo para evitar la formación de coágulos en el futuro.
No obstante, es importante consultar a un médico antes de iniciar cualquier tratamiento.
SÍNTOMAS
Los síntomas de una persona que padece trombosis Venosa Profunda son:
En tanto, la embolia pulmonar puede no presentar síntomas; sin embargo, en caso de que sí haya, son los siguientes: