Expertos en salud alertaron que, para frenar los efectos de la tercera ola de COVID-19 y prepararse para una “segura” cuarta ola, es urgente “tomar en serio” la estrategia de vacunación, con orden, sin caos, aceptar vacunar a niños, impulsar “de manera responsable desde el gobierno” el uso de cubrebocas, aumentar pruebas y vigilar que no se abandonen las medidas sanitarias.
“De esta manera se debe evitar el tamaño de la cuarta ola, porque la va a haber, y debemos prepararnos”, anticipó Andreu Comas, profesor e investigador del Centro de Investigación en Ciencias de la Salud de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
“Es necesario modificar de manera drástica la estrategia equivocada y el timón, porque se hizo con fines electorales; se debió comenzar en las grandes urbes, comenzar en lugares de más contagios, se hubiera vacunado al personal de turismo y fue un error garrafal no vacunar a los menores de 18 años”, dijo.
Al participar en el Meet Point Tercera ola COVID-19 ¿qué sigue? ¿qué hacemos?, de El FINANCIERO Bloomberg y moderado por la periodista Sofía Villalobos, recomendó “aumentar las pruebas masivas, el muestreo centinela en escuelas para manejar los casos asintomáticos y cortar la cadena de transmisión”.
Roselyn Lemus-Martin, doctora en Biología Molecular y Celular por la Universidad de Oxford, criticó que lo que ha detonado el alto número de contagios es el “el bajo porcentaje de vacunados, apenas el 30 por ciento, la estrategia lenta y caótica, en la que la gente no confía”.
Acusó que el subsecretario Hugo-López Gatell “está desinformando y sus afirmaciones de que los niños no están en riesgo no están basadas en la ciencia. No sé qué le hace decir eso; los niños sí están en riesgo, ojalá cambien de opinión”.
Sin embargo, anotó que "ninguna vacuna es suficiente", es indispensable "mantener medidas sanitarias".
Carol Perelman, química farmacéutica bióloga de la UNAM, aseguró que "si se hubiera impulsado el uso del cubrebocas, sí se hubiera acabado la epidemia en 12 semanas, como lo estimó López-Gatell", y apuntó que “si aumenta la movilidad con el regreso a clases, aumenta la proporción de contagios”.
También recriminó la posición de las autoridades, al afirmar que “las muertes de niños no son más por Covid, pero sí podemos prevenirlas; su riesgo no es cero. A todos nos da”.
