Porque en México una cada de cinco personas de 12 años o más han experimentado este tipo de agresiones
¿Conoces a alguien que haya sido víctima de ciberviolencia?
Esta guía de ciberviolencia te ayudará a identificar los diferentes tipos de agresiones que forman parte de este comportamiento, de acuerdo con la Secretaría de Gobernación (Segob).
La violencia cibernética contra las mujeres y las niñas puede ser definida como cualquier forma de violencia de género y sexual expresada a través de las tecnologías de la información y comunicación, como internet, teléfonos móviles y videojuegos, indica la Segob.
"Esta violencia toma muchas formas, incluyendo los insultos, comentarios degradantes, la burla en los blogs y foros; el acoso en línea o el acecho cibernético, incluyendo el envío de amenazas a través de correo electrónico o teléfono móvil; el robo de identidad o datos; el espionaje; la publicación en línea de fotos o videos sexualmente explícitos sin el consentimiento de la víctima", dijo la dependencia federal.
CATEGORÍAS
De acuerdo con la Red de Aprendizaje sobre la Violencia contra las Mujeres (Violence Against Women Learning Network) de la Universidad de Western Ontario, se reconocen seis categorías que abarcan todas las formas de violencia cibernética contra las mujeres y niñas:
Hacking: el agresor consigue las contraseñas de la víctima para modificar su información o para controlar sus actividades en la computadora.
Suplantación: el agresor envía mensajes ofensivos a la víctima desde su propio correo o la llama desde teléfonos desconocidos para evitar ser bloqueado.
Acechamiento: el agresor rastrea constantemente los movimientos en línea de la víctima; también puede monitorear sus movimientos fuera del internet.
Acoso: el agresor llama o manda mensajes constantemente a la víctima
Reclutamiento: en este caso, se usa la tecnología para atraer a las víctimas a situaciones peligrosas, como la trata de personas, mediante chatrooms o sitios de citas.
Distribución maliciosa: el agresor publica fotos o videos para avergonzar y denigrar a la víctima.
IMPLICACIONES
La violencia cibernética contra las mujeres y niñas tiene características específicas que la hacen un problema aún más complejo porque los perpetradores generalmente permanecen en el anonimato.
La violencia se lleva a cabo sin contacto físico, y puede provenir de cualquier parte; además, la violencia en línea es más rápida y requiere de menos esfuerzo.
Los perpetradores tienen mayor acceso a las tecnologías debido a su flexibilidad y variedad y los textos e imágenes que son usados para violentar pueden multiplicarse y permanecer en línea por tiempo indefinido.
LOS NÚMEROS
De acuerdo con el módulo sobre ciberacoso Mociba 2015 del Inegi, 24.5% de las personas mayores de 12 años en México ha experimentado algún tipo de acoso virtual.
Los hombres de 20 a 29 años fueron los que más dijeron sufrir este tipo de acoso , seguido de las mujeres de la misma edad.
La entidad donde más se reportó este ciberacoso fue Aguascalientes, seguida del Estado de México y Quintana Roo.
La mayoría de las personas que experimentaron estas agresiones las vivieron mediante el recibimiento de un virus o spam, videollamadas no deseadas y contenido multimedia que consideraron inapropiado.
Ser contactado con identidades falsas y recibir mensajes no solicitados fueron otros de los principales tipos de acoso virtual.
De acuerdo con el testimonio de los acosados, las personas que más los molestaron fueron desconocidos, seguidos de conocidos y amigos.
¿QUÉ HACER?
La Secretaría de Gobernación pide a los internautas que si se han identificado con alguna de estas situaciones, lo más importante es recordar que no lo has provocado y que debes denunciarlo.
Puedes reportar los contenidos directamente en las redes sociales o contactar a la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim) a través del correo conavim@segob.gob.mx o consultar el sitio en internet www.gob.mx/conavim.
También puedes consultar el sitio de la Policía Cibernética de la Ciudad de México.
