"No me quiero ir, nomás me hice pipí": abuelita pide que no la echen de su casa

La mujer subió llorando a la unidad para ser trasladada; ahí contó su historia de violencia familiar
La mujer subió llorando a la unidad para ser trasladada; ahí contó su historia de violencia familiar
Solloza.La mujer subió llorando a la unidad para ser trasladada; ahí contó su historia de violencia familiar
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Nación321
2023-05-23 |16:11 Hrs.Actualización16:10 Hrs.

El abuso contra los adultos mayores es una imagen constante en diferentes contextos en el país; una de las formas más comunes de este tipo de violencia es el abandono que sufren de parte de sus hijos y familiares. 

El tiktoker Cristian Michell subió a su cuenta la historia de una mujer de la tercera edad que fue abandonada por su hija. Según cuenta, en uno de sus viajes como conductor de Uber, conoció a una viejita que, llorando, se subió a su unidad para ser trasladada a un asilo. 

"Me fui a recoger mi viaje y cuando llego a la casa donde tenía que recoger a mi cliente, afuera en la banqueta estaba una viejita sentada como con cinco bolsas negras. Me puse a esperar a que saliera mi cliente, me subo al auto y la viejita que estaba sentada afuera de la banqueta de repente veo que traía un mandil puesto, veo que se empieza a secar la cara", narra.

Se trata de una mujer que, tras orinarse, fue echada de su casa por su yerno, quien no toleró un episodio de incontinencia. “La señora se subió al carro y empezó a bajar el vidrio de atrás. Se asomó por la ventana y le echó la bendición a la casa", explica. 

Al ver la imagen, Michell se consternó y preguntó qué le había pasado. “La señora me empezó a decir que su yerno se había enojado porque temprano se hizo pipí en la ropa, ya está grande y tiene incontinencia. Le empezó a gritar ‘ya no te soporto, vete de aquí’ y su hija no la defendió".

Colérico, “el yerno le dijo ‘ya me tienes cansado, ahora sí te voy a mandar a un lugar donde vas a estar a gusto, pero yo voy a estar más a gusto sin ti’ y la hija de la viejita no la defendió. Que su hija nada más se quedaba callada mientras su yerno le gritaba” dijo.

La mujer le contó que “desde las cinco de la mañana se levantó para hacerle el desayuno a sus nietas y el lonche al yerno que la corrió de la casa. Y en una de esas la señora se hizo en la ropa y el yerno le empezó a gritar groserías”.

Antes de bajarse, la mujer de la tercera edad le confesó que, implorando, le dijo a su familia: "No me quiero ir, yo nomás me hice pipí, si quiere yo lavo mi ropa". Lo peor, cuenta, es que ese mismo día era su cumpleaños.