PERFIL: Marco Verde, el boxeador con puño de acero que busca el oro olímpico

El sinaloense de 22 años se encuentra en la antesala de la gloria olímpica
El sinaloense de 22 años se encuentra en la antesala de la gloria olímpica
Puños olímpicos.El sinaloense de 22 años se encuentra en la antesala de la gloria olímpica
Especial
Nación321
2024-08-06 |16:50 Hrs.Actualización16:49 Hrs.

¡De Mazatlán para todo el mundo! 

Este 6 de agosto de 2024, el boxeador mexicano Marco Verde cimbró a todo el país con su pelea ante el británico Lewis Richardson, en la semifinal de boxeo de los Juegos Olímpicos de París 2024, en la categoría 71 kilogramos. 

El atleta mexicano se subió al ring con el bronce asegurado y con la posibilidad de abrirse la puerta para buscar el oro. 

Y así lo hizo: el mexicano conectó diferentes golpes sobre la humanidad de su rival, para imponerse y avanzar a la final de la especialidad, en la que buscará bañarse de dorado en un deporte que históricamente ha sido orgullo olímpico para México. 

Pero... ¿Quién es Marco Verde?

El destacado pugilista Marco Verde Álvarez, nació en Mazatlán, Sinaloa, hace 22 años, un 11 de febrero de 2002. 

En las venas de Marco corría el ADN deportivo y, esencialmente, el ADN del boxeo. En su apellido llevaba estampado el destino y es que su papá, Manuel Verde también fue boxeador y además participó en unos Juegos Olímpicos, en Barcelona 1992, aunque no corrió con el mismo 'tino' de su hijo y fue eliminado por en su primer duelo por el francés Patrice Aouissi, en los Semicompletos.

La carrera de Marco ha estado marcada, como cualquier atleta olímpico, por la disciplina deportiva y por la búsqueda de la victoria, pero no empezó en el boxeo.

Como buen sinaloense, el beisbol era parte de su vida y ahí empezó su camino deportivo, aunque su linaje le tenia preparada una ruta distinta. 

“Duré como siete u ocho años jugando beisbol. No me imaginaba ser boxeador. Yo nada más lo veía en la tele, porque como mi papá antes era boxeador, nunca me lo inculcó, nunca quiso. Prefirió que fuera beisbolista, pero un día me llevó (a ver box) y simplemente lo elegí. Creo que sentía que esto era lo que debía hacer”, declaró.

A los 10 años empezó a entrenar boxeo, su entrenador, Radamés Hernández, es el hijo del hombre que entrenó a su papá.

Para llegar a París, Marco tuvo que brillar en los Juegos Panamericanos del 2023, donde consiguió su boleto olímpico. 

Hoy está a una pelea de grabar en letras de oro su nombre en la historia deportiva del país.