Este miércoles 29 de noviembre, un grupo de miembros de la Confederación de Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) se apuesta en las entradas de la Cámara de Diputados para exigir a los legisladores analizar y aprobar el dictamen que propone reducir de 48 a 40 horas la jornada laboral semanal en el país.
Decenas de trabajadores sindicados apuestan por la presión social para que los diputados discutan el dictamen que apenas este martes fue regresado a comisiones donde se tendrá que analizar de nuevo y hacer las adecuaciones correspondientes para estar en línea con las "consideraciones vertidas en los foros de parlamento abierto en materia de jornadas y descanso laboral", indicó la presidenta de la Mesa Directiva, Maricela Guerra Castillo.
Los manifestantes exigen que la propuesta que no ha prosperado en la Cámara baja pueda ser discutida y, en su caso, avalada durante el último mes de este año, por lo que llaman a los diputados a discutir el tema.
