Como un acostumbrado ejercicio de evaluación y rendición de cuentas de nuestras encuestas electorales, y a reserva de que hagamos un análisis más detallado y con base en los cómputos válidos finales de las elecciones 2021, aquí adelantamos una evaluación preliminar de cómo nos fue con las encuestas electorales en esta temporada.
La encuesta nacional para estimar el voto para diputados federales es el ejercicio a destacar, ya que fue muy informativa y tuvo un alto nivel de exactitud, además de que, por primera vez en esta casa editorial, combinó una metodología mixta de entrevistas en vivienda y telefónicas. La encuesta ilustró el cambio en los patrones de apoyo demográfico y regional a Morena entre 2018 y 2021.
Nuestras 15 encuestas estatales tuvieron un desempeño que va de muy bueno a bueno en ocho entidades, de bueno a regular en cinco, y un desempeño pobre en dos. Fue un enorme reto cubrir las 15 elecciones para gobernador. Quizás por ello proliferaron las encuestas telefónicas robotizadas de varias organizaciones, algunas con buenos resultados y otras con estimaciones fuera de los rangos aceptables. Con base en nuestros datos, argumenté en cada foro público que en el escenario más adverso Morena ganaría 7 estados y en el más favorable 11. Al final prevaleció el más favorable.
Nuestras encuestas en alcaldías de la Ciudad de México lograron prever el swing o cambio de preferencias que hubo en los días posteriores al colapso del Metro. A reserva de evaluar su grado de exactitud, éstas anticiparon la alternancia en varias delegaciones.
El día de las elecciones hicimos encuestas de salida a nivel nacional y en siete entidades con elección para gobernador. La encuesta nacional pudo anticipar que, con los datos obtenidos por partido, la coalición de Morena estaba lejos de la mayoría calificada, pero con muchas posibilidades de la mayoría absoluta con sus aliados. Al igual que en la encuesta nacional preelectoral, se sobreestimó unos puntos a Morena, lo cual podría significar que, al igual que antaño, las encuestas están sobreestimando al partido gobernante.
La encuesta nacional de salida ofreció la radiografía de cómo votamos los mexicanos por segmentos demográficos y de actitudes. En las encuestas estatales se proyectó correctamente ganador o ventaja o escenario cerrado en seis entidades. La excepción: Nuevo León.
De nuevo, este es tan sólo un adelanto de una evaluación más exhaustiva y detallada de nuestras encuestas y de otras organizaciones que publicaron en este año electoral.
Es de destacarse la variedad de métodos que se emplearon: desde encuestas tradicionales en vivienda, pasando por telefónicas personales y robotizadas, y también encuestas en redes sociales. Signo de tiempos cambiantes. Lo curioso es que a nivel nacional no hubo tantas telefónicas robotizadas como en los estados.
En general, las estimaciones de las elecciones para diputados federales salió bien; pero eso no es nuevo, la industria encuestadora ha estimado relativamente bien las elecciones intermedias desde 2003. En contraste, en las encuestas estatales las desviaciones son mucho más notables, lo que podría significar que 2021 tenga altos niveles de error promedio. Ya regresaremos a ello.
Encuesta nacional para diputados federales
Nuestra encuesta nacional está peleando el puesto de la más exacta de este año.
Error promedio: 1.9 puntos.
Observaciones: Sobreestimamos a Morena en 4 puntos, pero nuestra desviación para cada partido fue entre 0 y 2 puntos. El resto de las encuestas sobreestimó a Morena en 7 puntos en promedio, con Reforma-Latinus y Varela-Citibanamex por 8 puntos, Simo Consulting-El País por 9, Indemerc por 14. La participación la estimamos en un rango de 45 a 51 por ciento. estuvo entre 51 y 52 por ciento. Ninguna otra encuesta nacional ofreció estimaciones de la participación.
Para considerar: Usamos la única metodología mixta que combinó entrevistas en vivienda y telefónicas.
Las mejores encuestas estatales para estimar las contiendas para gobernador, en ese orden, fueron las de Campeche, Guerrero, Tlaxcala, Querétaro, Zacatecas, Colima, Chihuahua y Michoacán, con desviaciones promedio pequeñas o razonables y acertadas en cuanto a ganador o proyección de competencia muy reñida. Comparando con el resto de las encuestadoras, tuvimos las encuestas más exactas en Campeche, Chihuahua y Tlaxcala.
En cinco entidades tuvimos tres encuestas medianamente buenas: Sonora, Nayarit y Sinaloa, donde la desviación promedio es más alta pero fueron certeras en la tendencia final del ganador. En otras dos entidades nuestras encuestas fueron regulares, Nuevo León y San Luis Potosí, donde se preveían contiendas cerradas que al final abrieron un poco. En Nuevo León hago un reconocimiento a Toni Mancillas, encuestadora de El Norte, quien fue la más cercana en 2015 y la más exacta en 2021. Esa entidad nos elude a las encuestadoras de la capital.
Nuestras encuestas menos precisas fueron las de Baja California Sur, donde claramente se cruzó ganador, y Baja California, donde se acertó ganador pero se subestimó al segundo lugar de manera notable, arrojando el error promedio más alto de las 15 estimaciones estatales.
Nuestros encuestas en alcaldías de la Ciudad de México anticiparon la alternancia en varias de ellas, como Álvaro Obregón, Coyoacán y Miguel Hidalgo, así como la continuidad en Benito Juárez, Iztapalapa, Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza. Nos queda la espinita de Azcapotzalco, que al final se volteó, pero la última encuesta ahí fue de abril, previa al colapso en Tláhuac.