Las razones por las que México teme un fraude electoral

Un grupo de simpatizantes de AMLO durante una manifestación de 2006
Un grupo de simpatizantes de AMLO durante una manifestación de 2006
Protesta.Un grupo de simpatizantes de AMLO durante una manifestación de 2006
Cuartoscuro
Ángel Nakamura
Reportero
2018-06-26 |05:56 Hrs.Actualización05:56 Hrs.
CREEMOS QUE IMPORTA POR...

Porque el país es perseguido desde hace años por el fantasma del fraude

En la historia mexicana reciente se han presentado casos en los que un sector de la población ha considerado que hubo fraude electoral y a unos días de la elección presidencial de 2018, persiste el temor de que ocurra de nuevo. La cosa se agrava si tomamos en cuenta que solo el 33.3% de los mexicanos tiene mucho o algo de confianza en los institutos electorales del país, de acuerdo con el Inegi.

¿De dónde viene ese temor? Aquí te dejamos los casos de supuesto fraude electoral y la postura del Instituto Nacional Electoral (INE) sobre la posibilidad de que se registre uno el 1 de julio.

1988: LA CAÍDA DEL SISTEMA

El primer gran referente de un fraude electoral en la historia reciente de México fue la elección presidencial de 1988, en donde el priista Carlos Salinas de Gortari venció a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, candidato del Frente Democrático Nacional (una coalición que integraba a diversos partidos políticos).

La historia oficial dice que la tarde del 6 de julio de 1988, Cárdenas mantenía una ventaja en el cómputo frente a Salinas cuando el conteo se interrumpió por una "caída del sistema". Al reanudarse el servicio, Salinas ya estaba arriba.

El entonces secretario de Gobernación, Manuel Bartlett, ha sido señalado desde entonces por la oposición como el autor de esa "caída" y posterior fraude electoral.

OJO: en 1988 las elecciones fueron organizadas por la Comisión Federal Electoral, que pertenecía a la Secretaría de Gobernación (Segob), es decir no las organizaba un organismo autónomo.


En una entrevista publicada el 8 de julio de 2017 en el diario Reforma, Manuel Bartlett aseguró que "la mejor prueba" de que Carlos Salinas no ganó la elección es que se quemaron las boletas, "que eran la prueba del fraude". 

Un día después, el 9 de julio, Bartlett aclaró al mismo diario que él nunca había dicho que Salinas no ganó, sino que no tuvo "elementos" para determinar resultados definitivos en la elección de 1988.

"Yo no puedo afirmar que Salinas ganó o perdió cuando estoy señalando que el computo de la elección se hizo en 300 distritos, y que nunca tuve los paquetes ni las actas originales porque fueron directamente desde los 300 distritos a la Cámara de Diputados. Yo solo informé a la opinión pública resultados preliminares", dijo el político.


Por su parte Cuauhtémoc Cárdenas le dijo a Milenio el 12 de julio de 2017 que es importante que Manuel Bartlett diga todo lo que sabe sobre el fraude electoral de 1988, pues debe estar enterado de muchas cosas importantes para un registro histórico.

"Estoy convencido de que hubo un enorme fraude electoral, había un sistema doble de cómputo en aquel momento, se cae el sistema. Y le toca (explicar) a quienes conozcan de estas cuestiones", dijo el hijo del expresidente Lázaro Cárdenas.


2006: EL 0.56% DE DIFERENCIA

La elección presidencial de 2006 tuvo como ganador al panista Felipe Calderón Hinojosa, quien venció al izquierdista Andrés Manuel López Obrador por solo 0.56%.

Es decir, Calderón obtuvo 15 millones 284 votos por 14 millones 756 mil 350 que recibió López Obrador.

Debido a lo cerrado de la elección, el Instituto Federal Electoral (IFE, antecesor del INE) no anunció a un ganador la noche de la jornada electoral, sino hasta una noche después, lo que sembró dudas (incluso existe un documental al respecto, Fraude: 2006, del cineasta Luis Mandoki)

Días después, se anunció que la ventaja era para Felipe Calderón por solo 0.58% de la votación, por lo que AMLO y sus seguidores denunciaron un fraude electoral con el lema "Voto por voto, casilla por casilla".

López Obrador encabezó varias protestas contra los resultados electorales. El 30 de julio de 2006, el candidato y sus seguidores decidieron montar un plantón en Avenida Reforma, que se prolongó durante siete semanas.


Aunque la elección fue impugnada, el 6 de septiembre el Tribunal Electoral ajustó la ventaja de Calderón a 0.56%. Ante ello, AMLO pronunció en otro mitin la frase "¡Al diablo con sus instituciones!". 

Finalmente el 20 de noviembre de 2006, López Obrador realizó una ceremonia donde se proclamó "presidente legítimo". Y el 1 de diciembre, en medio de protestas alrededor de la Cámara de Diputados, Felipe Calderón logró ingresar a ella con ayuda de los legisladores del PRI y rindió protesta como mandatario.

¿HABRÁ FRAUDE EL 1 DE JULIO?

El consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, explicó a Nación321 el pasado 16 de mayo que para la elección presidencial del 1 de julio no habrá posibilidad de un fraude electoral.

"La ley que hemos venido construyendo a lo largo de 25 años blinda todos los procesos y el día de la jornada electoral quienes reciben y cuentan los votos son los ciudadanos", afirmó el titular del órgano electoral mexicano.

"Cualquier ciudadano de a pie es la mejor garantía de que todos los votos se van a contar. Por todo lo demás, los partidos políticos auditan absolutamente todas las actuaciones del INE; no hay un espacio de decisión del INE que esté exento a la revisión, supervisión y vigilancia de los propios partidos políticos: el 1 de julio la voluntad de los ciudadanos emitida libremente se va a respetar" agregó Córdova en Nación321.

Sin embargo, Lorenzo Córdova admitió que la historia de México ha sido testigo de fraudes electorales, aunque según él, eran otras épocas.

Para el consejero presidente del INE, justamente porque hay una historia de manipulación de la voluntad ciudadana detrás es que se ha venido construyendo uno de los sistemas electorales más robustos del mundo.