Luego de las elecciones de este 2 de junio, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) perfila para convertirse en la segunda fuerza política del país, al haber desplazado al Partido Acción Nacional (PAN) en la Cámara de Diputados.
Según los datos preliminares, obtenidos del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), el PVEM conseguiría 75 curules, frente a los 70 del PAN, que quedaría como tercera fuerza política.
El cálculo incluso fue presentado en la conferencia del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Al día de hoy, el PVEM es la quinta fuerza política del país, sólo por arriba del Partido del Trabajo (PT), el otro aliado de Morena.
Para estas elecciones presidenciales, sin contar los votos en coalición con el PT y Morena, el Verde obtuvo al menos el 7.78% de los sufragios a nivel federal.
El Verde Ecologista de México se ha mantenido como un partido satélite de varias fuerzas políticas desde hace 32 años, pero ¿cómo lo ha logrado?
En la década de los 80 surgió una ONG en pro del medio ambiente, que decidió iniciar su recorrido como partido político: se trata del PVEM, que tras recorrer varias partes del país, logró en 1991, por primera vez, su registro, en las elecciones intermedias del sexenio de Carlos Salinas de Gortari.
Durante esa elección perdió su registró, pero lo recuperó en 1993, cuando ganó un lugar como bloque opositor en la Cámara de Diputados en la 57 legislatura.
Pero ahí no paró su andar. Previo a las elecciones del 2000, el partido logró aliarse con el PAN y juntos lograron ganar la presidencia con Vicente Fox.
El amor duró poco y para las siguientes elecciones presidenciales, el Partido Verde logró una alianza con el PRI, donde apoyaron la candidatura fallida de Roberto Madrazo.
El partido se mantuvo aliado al PRI hasta 2012, cuando triunfó con Enrique Peña Nieto, quien acabó con el breve ciclo panista de dos sexenios. Además, ese año el PVEM conquistó en Chiapas su primera gubernatura.
En el 2018, se decidió seguir con la alianza del tricolor; sin embargo, esta vez no le fue tan bien y el candidato que ambos perfilaron, José Antonio Meade, no logró el triunfo.
A sabiendas de que esa amistad ya no le convenía, en septiembre de ese mismo año, el Verde rompió con el PRI para hacer una alianza con Morena y con ello transfirieron cinco diputados federales al barco de la 4T, lo que le dio a los guindas la mayoría en el Congreso.
Actualmente, el PVEM ya es un aliado incuestionable de la 4T.