Personal de la Guardia Nacional efectuó cateos en Jalisco, donde se investiga la relación con el Rancho Izaguirre, considerado un campo de entrenamiento delictivo donde habrían sido victimadas personas privadas de su libertad.
En cumplimiento a una orden de cateo otorgada por el juez de Control de Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio, se intervino la finca ubicada en la colonia Colinas de la Cruz, donde hace días se ocultó una persona que era seguida por los oficiales, estos observaron, desde el exterior, un arma larga y diversos vehículos, por lo que dieron aviso al Ministerio Público Federal, que solicitó la diligencia de cateo para el inmueble.
Dentro se aseguraron 11 artefactos explosivos, una granada, un artefacto pirotécnico, 84 cápsulas detonantes, nueve armas largas, dos armas cortas, un lanzagranadas, una lámpara para arma de precisión y un láser.
También se incautaron 82 cargadores; dos mil 220 cartuchos de diversos calibres, siete chalecos balísticos, seis chalecos tácticos, cuatro cascos balísticos, cuatro rodilleras, dos coderas, un par de botas, tres paneles, cinco porta cargadores, un porta cargador doble, cuatro vehículos y una motocicleta.
OTRO NARCO RANCHO EN TEUCHITLÁN
Por otra parte, la Fiscalía General de la República (FGR) cateó otro rancho en Teuchitlán, que presuntamente fue utilizado como un campo de entrenamiento del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
La finca se ubica en la comunidad de La Vega, a pocos kilómetros del Rancho Izaguirre, donde se asentó campo de reclutamiento y presunto exterminio de personas revelado por el colectivo de personas desaparecidas, denominado Guerreros Buscadores de Jalisco.
En el predio, ubicado en los linderos de la Presa La Vega, se registró una intervención oficial el pasado 29 de enero, dónde fueron aseguradas 38 personas, y puestas a disposición del Ministerio Público.
Posteriormente se determinó la libertad de 37 jóvenes, entre ellos una mujer, se varió el estatus jurídico al considerarlos víctimas, ya que fueron reclutados de manera forzada, enganchados con propuestas de trabajo que les ofreció altas remuneraciones.
La última ocasión en que perdieron contacto fue al atender las ofertas laborales en la Central Camionera Nueva metropolitana de Guadalajara. Los afectados son originarios de Jalisco, y otros provenían de la Ciudad de México, Estado de México, Veracruz, Tabasco y Quintana Roo.
En su momento se aseguraron 18 cargadores y más de mil 800 cartuchos y cuatro radios, además de implementos de construcción y excavación.
Al momento no se ha informado del resultado del cateo, y el sitio permanece asegurado por personal federal y policías estatales de Jalisco, al igual que el Rancho Izaguirre.
