A unas horas de que concluya el Título 42 migratorio, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Guardia Nacional y policía estatal, preparan un operativo especial en Matamoros, para llevar a un albergue a más de 5 mil migrantes que siguen varados en esta ciudad.
En las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM) en esta ciudad fronteriza, los autoridades de los diferentes órdenes de gobierno, se coordinan para las acciones de apoyo a los migrantes que implementarán.
En el lado de Estados Unidos, la Patrulla Fronteriza estadounidense colocan postes y alambres de púas para tratar de evitar con ello que los migrantes que han estado cruzando nadando por el Río Bravo desde hace algunas semanas, lleguen a Brownsville, Texas.
Los migrantes buscan llegar a Estados Unidos, pues tienen la creencia que al ser detenidos por las autoridades de ese país, tendrán la oportunidad de solicitar asilo humanitario en ese país.
Sin embargo, la mayoría de ellos son expulsados y enviados de nueva cuenta a México a través de la Aduana de Matamoros, Tamaulipas
El director general del Instituto Tamaulipeco para los Migrantes, Juan José Rodríguez Alvarado, explicó que son alrededor de 20 mil los migrantes que se encuentran en la frontera, mayormente en Reynosa, donde hay 12 mil y 5 mil 50 en Matamoros.
La política llamada Título 42, creada desde la aparición del COVID-19, cerró las fronteras, lo que hizo casi imposible que personas de otros países solicitaran asilo en Estados Unidos.
Desde hace semanas, en el caso de Matamoros, más de 2 mil migrantes de Venezuela, Haití y México, están viviendo en el bordo del Río Bravo, esperando la oportunidad para poder cruzar a nado o utilizando llantas o inflables para cruzar, algunos con menores de edad.
Hace 15 días, un grupo delincuencial, según relatos de los migrantes, incendiaron algunas de las casas provisionales que usaban algunos de los migrantes, muchas de ellas formadas con palos, lonas, plásticos.
Los migrantes huyeron y se lanzaron al río para cruzar al lado de EU y solicitar la ayuda internacional, denunciando los peligros a los que se exponen al permanecer en el lado mexicano.
A partir de esas fechas, los cruces masivos se han registrado de manera casi diaria, con los peligros que esa situación conlleva.
