A casi un mes de pugna, el gobierno de Nuevo León clausuró la refinería de Cadereyta.
En un comunicado, el gobierno explicó que en la refinería se negaron a colaborar con la Secretaría de Medio Ambiente en una inspección que fue acordada para descartar que emita contaminantes a la atmosfera.
"Ante la negativa de la refinería de Cadereyta de colaborar y recibir al equipo de la Secretaría de Medio Ambiente, y debido a la ostensible y notoria emisión de contaminantes a la atmósfera, que afecta a la población, y conforme a la suspensión, esta mañana quedó clausurada la refinería", informó.
Agregó que con el objetivo de llevar acabo la inspección para dar cumplimiento a la orden de la Juez Segunda en Materia Administrativa, el equipo de la Secretaria de Medio Ambiente acudió a la refinería de Cadereyta; sin embargo, se les negó el acceso a pesar de la orden de la juez, por tal motivo se procedió a la clausura.