El 'día cero' podría llegar pronto para las alcaldías de la Ciudad de México y municipios del Estado de México, pues si no llueve en breve en la región donde se ubican las presas Miguel Alemán, Valle de Bravo, Villa Victoria y El Bosque, en Michoacán, ya no habrá agua para mandar a la capital del país y parte del territorio mexiquense, advirtió Jorge Ramírez, investigador del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y del Instituto de Ciencias del Mar, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Uno de los más recientes registros señala que estas tres presas en su conjunto están al 26.6% de su llenado y en las regiones donde se localizan pareciera que se está en plena temporada de estiaje, cuando ésta concluyó a mediados del mes de mayo anterior, pero si este porcentaje desciende a alrededor del 17 puntos porcentuales, ya no se podrá extraer agua para mandarla a potabilizar en la potabilizadora de Berros, situada en el municipio de San José Villa de Allende.
El científico indicó que en esta época del año, dichos embalses deberían estar entre 80 y 84% de su llenado.
“Hoy por hoy no tenemos de manera natural y eficiente en términos de cantidad, esperar que las lluvias sean bondadosas, en este contexto, durante las épocas neutrales, es decir, entre un 'Niño' que acaba de concluir en mayo y 'La Niña' que se proyecta para comienzos de septiembre, nos habilitaría en un escenario de precipitaciones importantes. De manera artificial, hay tecnologías limpias, por ejemplo, se pueden formar nubes trayendo la humedad desde el Pacifico para precipitarla en las presas de manera forzada, por decirlo de esta manera con el yoduro de plata, que no es realmente funcional. Es carísimo por el tema de la plata”, acentuó el experto.
A la fecha, en aquella región del Estado de México y Michoacán, hay un retraso de entre un mes y mes y medio en las lluvias, lo que ha derivado en los bajos niveles de agua en los embalses de Valle de Bravo, Villa Victoria y El Bosque y de no llover pronto, “sí llegaríamos a ese día cero, esto no quiere decir que desaparece el agua (de las presas), sino que ya no es posible extraer porque el nivel rebasó la ventana de extracción que se tiene en la cortina, estaríamos hablando alrededor de mediados de julio”.
Negligencia por décadas
Jorge Ramírez, investigador del Conacyt y en el Instituto de Ciencias del Mar de la UNAM, subrayó que es determinante seguir o no explotando el Sistema Cutzamala, pues su problema se origina en un crecimiento urbano desordenado que se ha tenido en la capital del país principalmente, donde al año han llegado a asentarse más de un millón de personas y las autoridades no pensaron en que esta población "iban a necesitar servicios, tanto para conducción de drenaje y desechos como para abastecimiento de agua potable”.
Es de referir que este sistema hidráulico federal conduce agua potable a alcaldías como la Álvaro Obregón, Azcapotzalco, Benito Juárez, Coyo acán, Cuajimalpa, Cuauhtémoc, Iztacalco, Iztapalapa, Magdalena Contreras, Miguel Hidalgo, Tlalpan y Venustiano Carranza, en la Ciudad de México.
Así como a los municipios mexiquenses de Toluca, Huixquilucan, Naucalpan, Tlalnepantla, Nicolás Romero, Atizapán, Cuautitlán Izcalli, Tultitlán, Coacalco, Tecámac, Ecatepec, Nezahualcóyotl y Valle de Chalco Solidaridad.
Una decisión tardía.
El hecho de que la Comisión Nacional del Agua (Conagua), haya cerrado las válvulas el 06 de abril pasado en la presa Miguel Alemán, cuando su registro era de 27.5% de llenado, con el argumento de que fue para recuperar sus niveles y seguir extrayendo el recurso natural de la de El Bosque y Villa Victoria, terminó por encarecer del líquido a estos dos últimos embalses, aún cuando la presa michoacana estaba a 52% de su capacidad, citó Alberto Dana Shilton, integrante del Comité de Operación del Lago de Valle de Bravo.
“Y Villa Victoria estaba alrededor del 25 y teníamos agua todavía en la presa El Bosque, en Zitácuaro, que estaba en 52%, del 6 de abril, hasta la semana pasada, Zitácuaro bajó de ese 52% al mismo 27% de Valle de Bravo, entonces, ya no hay agua en Zitácuaro tampoco, ahorita estamos empatados con las tres presas y el 7.8, 7.9 metros cúbicos por segundo que se mandaba a la Ciudad de México, ya disminuyó a partir de anteayer (la semana pasada).
El experto califico la situación actual de las tres presas como muy crítica y que el famoso 'día cero' dependerá que los actuales niveles ya no bajen y, sobre todo, que llueva para aliviar un poco la problemática.
"La situación está muy crítica, pero lo del famoso 'día cero', pues depende de qué se quita y qué no se quita, si no hay agua pues ya no se puede sacar agua, estamos muy cerca del nivel mínimo al que se puede llegar, pero ya no tenemos la presa de Michoacán con agua, entonces todo depende de cuándo empiece a llover, fuera de eso vamos a dejar de mandar agua y la Ciudad de México tendrá que conseguirla en otro lado, lo que es gravísimo pero no hay de otra”, finalizó Dana Shilton.