Familiares de soldados muertos en Ensenada señalan abusos de mandos militares

Los hechos ocurrieron el pasado 20 de febrero
Los hechos ocurrieron el pasado 20 de febrero
Abuso militar.Los hechos ocurrieron el pasado 20 de febrero
Especial
Crisstian Villicaña/Corresponsal
2024-03-09 |10:57 Hrs.Actualización10:56 Hrs.

La muerte de siete jóvenes ahogados en el mar de Ensenada, Baja California, mismos que estaban a punto de graduarse como elementos de la Guardia Nacional, provocó que sus familiares señalaran una supuesta serie de abusos de los cuales fueron víctima este grupo y otros que aspiran a formar parte de las fuerzas militares de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Como ejemplo primordial colocan el pasado 20 de febrero en Ensenada, cuando los cadetes fueron obligados a realizar prácticas en el mar pese a que la zona se encontraba en alerta por un oleaje de tres a cinco metros de altura, con condiciones no aptas para ingresar, indicando que fueron parte de una especie de “novatada” antes de graduarse.

Lo anterior fue descrito en un grupo conformado por padres y madres de familia de los jóvenes, donde se narró el constante abuso del cual son supuestamente sujetos los que ingresan a los batallones, siendo estos puestos a actividades que ponen en riesgo sus vidas.

“Me dijo que una chica se estaba ahogando y uno le lanzó un salvavidas y esa persona que fue responsable de los muchachos los regañó horrible, diciéndoles que por qué habían hecho eso; el (mando militar) se estaba riendo mientras la chica luchaba por salir”, se lee en un testimonio de una madre que por seguridad permanece anónimo, la cual narró lo que su hijo le platicaba.

Dentro de esos testimonios también hay el de una persona que dice ser madre de un joven que prefirió desertar ante la violencia física que experimentaba por parte de sus superiores.

Fue tanto el abuso al muchacho que al llegar a casa duró días sin comunicarse, visiblemente conmocionado por lo que había vivido y tenido que soportar; golpizas, hambre, días sin poder dormir, según se lee en el grupo de familiares de los soldados.

Para estos últimos es evidente que el día que sus hijos sucumbieron ante el embravecido mar las cosas se salieron de control al estar normalizados los atropellos, en especial a los que están en proceso de convertirse en soldados.

Añaden que desde el momento en que empiezan a hacer el trámite son explotados ya que se les exigen cantidades de dinero para ser admitidos, una vez adentro afrontan otras situaciones como el que les proporcionen alimentos que les terminan cobrando, dejando a los jóvenes con poco o nulos ingresos.

“Ese dinero termina en las manos de los generales de la Sedena”, escribió uno de los familiares.

Por el momento un mando militar se encuentra bajo investigación por lo ocurrido con este grupo de siete jóvenes que perdieron la vida por supuesta negligencia, los cuales ya fueron retornados a sus Estados de origen para ser velados y posteriormente llevados al cementerio.