Hace 20 días, tras un derrumbe en la mina de carbón "El Pinabete" en Sabinas, Coahuila, 10 trabajadores quedaron atrapados, familiares y amigos no pierden la esperanza de rescatarlos con vida.
Este accidente ha causado indignación entre las personas, debido a que no es la primera vez que in accidente de esta magnitud ocurre en el país. Entre los cuestionamientos que se han hecho es el de castigar a los dueños de estos complejos que, en ocasiones no cuentan con las condiciones adecuadas para los trabajadores o con un protocolo inmediato en caso de incidentes.
Aquí te contamos las historias que deben quedar en la memoria de los mexicanos y quiénes eran los mineros, descritos por sus familiares.
Sergio Celebró hace un mes los 15 años de su hija mayor, tiene el sueño verla convertirse en una profesionista. Uno de sus familiares, Plutarco Ruiz, sobrevivió a un derrumbe similar en una mina hace años.
Gabriel Cruz es originario de La Florida, Francisco I. Madero. Lleva más de 20 años de minero. Afuera lo esperan sus hijas, su esposa, su padre y sus cuñados, quienes además trabajan colaboran en los trabajos de rescate.
El más longevo de los trabajadores que quedaron atrapados, cuenta con 45 años de experiencia como minero. Su familia cuenta que él es la tercera generación de mineros en su familia y que ya se había jubilado; sin embargo, decidió trabajar en los "pocitos" para mantenerse activo y continuar con la misma solvencia económica.
Esta es la segunda vez que en su familia experimentan un accidente así, pues hace 16 años, en Pasta de Conchos, su primo Gil Rico Montenegro murió en el accidente.
Lo esperan su esposa María Elena Chávez, sus hijos Epigmenio Montelongo Chávez, Jaime Emmanuel Montelongo Chávez; también son mineros. También sus primos y sobrinos.
Uno de los mineros más nuevos en "El Pinabete", había entrado a trabajar una semana y media antes del accidente, tiene 34 años de edad y desde joven se desempeñó como minero.
Al originario de Agujita, Sabinas lo esperan su esposa Martha Huerta, sus dos hijos y sus hermanos.
Con 22 y 42 años José Rogelio Moreno Morales y José Rogelio Moreno Morales, respectivamente; padre e hijo quedaron atrapados en la mina carbonera.
Sus esposas, hijos y de más familiares esperan que los rescaten.
Minero desde joven y con 45 años, Mireles Arguijo quedó atrapado, trabaja con su hijo Hugo Tijerina Amaya, quien también permanece atrapado.
Su cuñado y exminero José Luis Amaya González, trabaja de la mano con el equipo que coordina Laura Velázquez, de Protección Civil, la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) y la Secretaría de Marina (Semar), para rescatarlo.
Afuera lo espera su esposa, Mónica Lizbeth Amaya Gonzales.
Tiene 39 años de edad, es minero desde hace 18 años. Padre de una hija a la que apoya con la crianza de sus tres nietos a quien ve como sus propios hijos.
Una semana antes del accidente, se había convertido en padre de una niña. su esposa cuenta que desde la llegada de su hija se le veía más alegre y motivado.
A pesar de su corta edad (24 años), ya lleva varios años siendo minero. Lo esperan su hija, su esposa, sus padres y su abuela.
A Mario le apasionaba cantar, aunque no lo hacía de manera profesional, días antes de la inundación de la mina, había comprado una bocina y un micrófono para convivir con su familia.
Tenía 45 años y era minero desde los 18 años. Lo espera su esposa, su papá y sus hijos.
Con 29 años de edad y de familia minera, quedó atrapado con su primo y su hermano José Luis Tijerina Amaya y Raymundo Tijerina Amaya; sin embargo, José Luis no acudió a trabajar el día del incidente, porque se le hizo tarde.
Raymundo se encontraba en la mina cuando ocurrió la inundación, pero la fuerza del agua lo arrojó a la superficie. El único que quedó atrapado fue Hugo Tijerina.
Lo esperan sus tres, hijos su esposa, sus papás y cinco hermanos.
