Graciela Alfaro, una mujer de 32 años originaria de Tehuacán, Puebla, tuvo que fingir su muerte para evitar que su pareja sentimental acabara con su vida, y gracias a eso se encuentra en el hospital recuperándose de la agresión.
De acuerdo con los testimonios de su familia, José Ángel 'N', presunto agresor de Graciela, la atacó tras una discusión en la que él le prohibió visitar a su cuñada. Al día siguiente, al acompañarla a su trabajo, la agredió con una piedra y con una arma blanca en un camino solitario.
Con una herida de 25 centímetros en la zona del cuello, Graciela fingió estar muerta para salvarse y, tras perder de vista a su agresor, logró pedir ayuda a los vecinos del lugar.
Dos habitantes de esa zona atendieron al auxilio de la joven madre y le dieron el apoyo. Mientras la mantenían sentada en una silla, las personas llamaron al número 911 para solicitar con urgencia una ambulancia.
A pesar del grave estado en que se encontraba, Graciela logró informar a los policías sobre las características de su pareja y explicar que él la agredió; luego perdió el conocimiento.
En el Hospital General fue intervenida quirúrgicamente, su estado de salud es grave, señaló su hermano, quien exigió a la Fiscalía General del Estado que se haga justicia. Graciela, madre de cuatro hijos, permanece hospitalizada en estado crítico.