La pandemia por el coronavirus ha provocado la pérdida de miles de empleos formales e informales, y el mercado de las rentas de vivienda es uno de los más afectados.
Se estima que una persona destina alrededor del 30 por ciento de sus ingresos a la renta de una casa o departamento, y con el recorte de empleos o de los salarios, es probable que para muchos les sea imposible seguir cubriendo este gasto.
Es por ello que en esta ocasión, Vivanuncios, el portal inmobiliario de eBay, te trae algunas recomendaciones para negociar la rescisión del contrato de alquiler con tu casero y que no resultes aún más afectado.
Diálogo
Lo primero es sostener un diálogo honesto con el casero. Exponerle tus razones para decidir la terminación del contrato de arrendamiento para que puedan llegar a un acuerdo que beneficie a ambos.
Lo ideal es hacerlo con por lo menos un mes de anticipación, aunque por la situación actual es probable que sólo puedas hacerlo unas semanas antes. De cualquier forma, es indispensable tener esta plática con el propietario, ya que si sólo abandonas el inmueble sin aviso podrías ser sujeto incluso de sanciones legales.
Las cláusulas
Una vez expuestos tus motivos para la rescisión del contrato de alquiler, tendrán que revisar juntos las cláusulas de este, para determinar cómo deben proceder.
Sin embargo, si la situación extraordinaria provoca que las cláusulas afecten demasiado a alguna de las dos partes, se puede optar por llegar a otro acuerdo no expresado en el contrato, siempre que se haga de forma escrita y que esté avalado con la firma de ambas partes.
Indemnización
Por parte del propietario, es evidente que pedir una indemnización al inquilino para permitirle la rescisión del contrato de arrendamiento tal vez no sea lo más conveniente, pues es muy probable que el recorte en sus ingresos sea la causa por la cual deba dejar el inmueble. Sin embargo, como se dijo, siempre se puede llegar a un acuerdo aunque no esté plasmado en el contrato.
Aunque inicialmente no es para eso, podrían llegar al acuerdo de que el propietario tome el depósito inicial como indemnización de renta. Esto beneficiará a ambos, ya que dará al menos un mes para encontrar un nuevo inquilino y tú podrás dejar el inmueble sin tener que hacer gastos extra.
Cesión de derechos
Este es un mecanismo no tan utilizado pero completamente legal. En pocas palabras se trata del cambio de titular en el contrato de arrendamiento. Los derechos, obligaciones y cláusulas del contrato se transfieren a otra persona, que ahora fungirá como nuevo inquilino. El plazo también se mantiene.
Para poder hacer esto, es necesario el consentimiento expreso del arrendador, y será tu deber buscar a un nuevo inquilino y demostrar que es de entera confianza.
Otra opción es el subarrendamiento, aunque no es propiamente una forma de terminación del contrato de arrendamiento, sino que se trata de subarrendar el espacio a una tercera persona, pero en este caso tú seguirás siendo el responsable ante el propietario. Esta es la principal diferencia entre cesión y subarrendamiento.
Carta de rescisión
Una vez que pacten qué acuerdo tomarán, deben plasmarlo por escrito en una carta de rescisión de contrato de arrendamiento. Aunque no es un requisito indispensable, es altamente recomendable que exista. De esta forma, ambas partes estarán amparadas ante cualquier eventualidad en el futuro.
El formato es libre siempre y cuando contenga al menos los siguientes datos esenciales:
Ambas partes deben conservar una copia que les servirá como comprobante de la operación.
Estas son las recomendaciones para llevar la rescisión de contrato de arrendamiento a buen término. Siempre es recomendable hacer la negociación por la vía pacífica, evitando que intervengan terceras personas como abogados o jueces.
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