El depósito de renta es una de las obligaciones que se adquieren cuando se firma un contrato de arrendamiento, y este se refiere a un pago inicial de una cantidad determinada que debe realizarse para poder habitar el inmueble.
Y como sabemos que puede ser un tanto confuso, te dejamos TODO lo que debes saber de este requisito.
¿PARA QUÉ ES EL DEPÓSITO DE LA RENTA?
El depósito de renta es un monto que se le entrega al propietario del inmueble a modo de garantía durante el plazo que habites su vivienda. Funciona como un respaldo para el mismo dueño en caso del incumplimiento de los compromisos del inquilino que se establecen en el contrato.
Normalmente el depósito de renta se regresa al finalizar el contrato; sin embargo, al funcionar como una garantía, existen diferentes casos en los que el arrendador cuenta con todo su derecho de retenerlo y hacer uso de él.
¿CUÁNTO SE PAGA?
La cantidad a pagar como depósito varía según cada inmueble y cada arrendador. Por lo general, equivale a la cuota de un mes de renta, pero ésta puede ser mayor en caso de que no existan requisitos forzosos que formalicen el contrato.
¿POR QUÉ LO PODRÍAS PERDER?
El arrendador cuenta con el derecho de quedarse con el depósito únicamente si se incumplen las obligaciones a las que te comprometiste en el contrato, razón por la cual, antes de firmar, deberás leerlo cuidadosamente.
Si el inmueble no es entregado al propietario en las condiciones mencionadas y por lo tanto existen daños en la vivienda, fuera de los deterioros causados por el uso normal, éste podrá retener el depósito y utilizarlo para las reparaciones que deban hacerse.
Estos pueden ser ventanas o puertas rotas, hoyos en paredes, mal uso de instalaciones, etc. En el contrato se debe establecer claramente el estado en el que se entrega el inmueble, así como las condiciones en las que se encuentra al momento de empezar a habitarlo.
Contar con facturas de pago pendientes y realizar modificaciones al inmueble sin autorización previa, son otras de las razones por las que podrías perder tu depósito de renta.
¿CÓMO HACER QUE TE LO REGRESEN?
Revisa cada detalle del contrato de arrendamiento. Pon especial atención en las cláusulas que condicionan la devolución de tu depósito, de esta manera podrás saber con todo lo que debes cumplir para asegurar que al final se te regrese el depósito.
Además, es clave que revises detalladamente el inmueble al momento de habitarlo, a modo que puedas notificar al arrendador en caso de cualquier problema o desperfecto que exista y así evitar que te cobre el depósito por esto.
En el caso de que algo se dañe durante tu estancia, lo mejor es que procures repararlo de manera que puedas entregar el inmueble en las mismas condiciones en las que lo recibiste y que así el depósito de renta de la casa te sea devuelto.
¿Y SI NO ME LO DEVUELVE?
Debes saber que el dueño del inmueble cuenta con un plazo de 30 días para hacer la devolución de tu depósito de renta de casa, o bien, para notificarte sobre posibles desperfectos en la propiedad causados en tu estancia junto con un presupuesto de reparación.
A excepción de daños o adeudos, el propietario no podrá retener tu depósito, por lo que, si durante los 30 días después de finalizar el contrato éste no te notifica de algún desperfecto por el que se te pueda cobrar, ni cumple con la devolución de tu depósito, contarás con todo tu derecho de presentar una demanda.
Ya sabes cómo funciona el depósito de renta de una casa. Pon atención antes de firmar el contrato y asegura que el depósito de renta se te regrese.
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