La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, así como su secretario de Economía, Marcelo Ebrard, anunciaron que buscarán un ’trato preferencial’ en las nuevas medidas arancelarias impuestas por Estados Unidos, por las que desde el 2 de abril se impondrán aranceles de 25% a la importación de automóviles.
“Si hay aranceles tan altos, lo que tenemos que buscar es un trato preferente para México, de manera que tengamos las condiciones para proteger empleos y la actividad económica de nuestro país. Ha sido difícil, pero las gestiones de la presidenta abrieron la puerta con Trump”, dijo Ebrard.
Desde Palacio Nacional, en un enlace remoto desde Washington, donde sostiene conversaciones con autoridades de EU, Marcelo Ebrard dijo que los aranceles ya son un hecho, pero aún hay puntos que se pueden negociar.
Ante ese argumento, expuso que los vehículos fabricados en México contienen un alto porcentaje de partes de Estados Unidos, lo que les permitirá acceder a descuentos y evitar el arancel del 25%.
En este sentido, la presidenta Sheinbaum explicó que, según la orden firmada ayer por Trump, la medida de aranceles del 25% incluye una salvedad para México y Canadá, países firmantes del T-MEC, ya que esos aranceles sólo se aplicarán proporcionalmente a partes no estadounidenses.