Porque el presidente aseguró que una de las cosas más difíciles es no demostrar su cariño a otros
El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que una de las cosas más difíciles de la emergencia sanitaria es no poder abrazar y besar a sus amigos y al pueblo de México, por lo que aseguró que cuando terminé la emergencia hará un llamado a una ronda de abrazos.
"Me cuesta mucho, llevo décadas saludando, abrazando y besando a mis amigos y amigas, a mis semejantes porque amor con amor se paga, ahora ya no se puede, espero que no tarde mucho y que volvamos a abrazarnos. Cuando salgamos de esto, que vamos a salir, voy a convocar abrazos y besos al zócalo y en todas las plazas públicas para celebrar de esa manera".
Esto, luego de explicar que seguirá realizando giras en los estados para supervisar obras, pero sin acercarse a la gente, sin tener contacto físico para evitar la propagación del COVID-19.
Al finalizar su conferencia de prensa, reiteró que pronto sería el día de los abrazos y los besos en todas las plazas públicas "porque vamos a superar esta crisis del coronavirus, y la crisis economía y la de bienestar social".