Lo sobreviven sus seis hijos, su madre Nita Pérez y su pareja Roxanne Cheesman.
Porque la corrupción es uno de los problemas que AMLO quiere erradicar en México
El presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó este jueves el suicidio del exmandatario de Perú, Alan García.
"La corrupción es la nueva peste del mundo. El neoliberalismo unió los negocios privados a los públicos. Urge separar el poder económico del político; que el gobierno represente a todos", escribió AMLO.
Lamento el suicidio del expresidente de Perú, Alan García y todo alrededor del caso Odebrecht. La corrupción es la nueva peste del mundo. El neoliberalismo unió los negocios privados a los públicos. Urge separar el poder económico del político; que el gobierno represente a todos.
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) 18 de abril de 2019
EL SUICIDIO
Alan García se suicidó este miércoles de un disparo en la cabeza cuando la policía llegaba a su casa para arrestarlo en el marco de una investigación fiscal por un esquema de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht.
García, de 69 años, falleció en el hospital Casimiro Ulloa de Lima, al que fue trasladado poco después de dispararse dentro de su habitación, en el segundo piso de su vivienda en el distrito residencial de Miraflores.
"Consternado por el fallecimiento del expresidente Alan García. Envío mis condolencias a su familia y seres queridos", dijo el presidente peruano, Martín Vizcarra, en Twitter.
Consternado por el fallecimiento del ex presidente Alan García. Envío mis condolencias a su familia y seres queridos.
— Martín Vizcarra (@MartinVizcarraC) 17 de abril de 2019
Lo sobreviven sus seis hijos, su madre Nita Pérez y su pareja Roxanne Cheesman.
CON LA POLÍTICA EN LAS VENAS
Alan García llevaba la política en las venas. Su padre, Carlos García, militante de la Alianza Popular Revolucionaria Americana (Apra) fue perseguido y detenido en la década de los 50 al igual que millones de peruanos. Eso marcaría a García para siempre.
En su juventud fue preparado por Víctor Raúl Haya de la Torre, uno de los líderes del partido fundado a inicios del siglo XX bajo los postulados de la revolución francesa y que ha sobrevivido a las persecuciones de parte de gobiernos militares y civiles.
García estudió Derecho en Lima y España y Sociología en la Sorbona, Francia, y retornó a fines de la década de 1970 a Perú para participar en una Asamblea Constituyente. En 1979, al morir Haya de la Torre, fue consolidándose en la dirección del partido apenas entrado en sus 30 años.
En su marcha ascendente en la política ganó las elecciones presidenciales en 1985 con 36 años en medio de un respaldo popular masivo, que lo llamó "el presidente de la esperanza", con discursos intensos en los que criticaba la expansión neoliberal de esa década.
Alimentado por el gasto estatal, los aumentos salariales y los controles de precios, las políticas proteccionistas de García crearon un aparente bienestar económico. Limitó los pagos de la deuda externa al 10% de las exportaciones, lo que transformó a Perú en un paria para las organizaciones internacionales de crédito.
Al terminar su gobierno apoyó la candidatura presidencial de un postulante independiente y desconocido hasta ese entonces, Alberto Fujimori, para evitar que el novelista Mario Vargas Llosa, rival y crítico tenaz, ganara los comicios.
EXILIO
Fujimori ganó las elecciones pero pagó mal a García, al que persiguió con acusaciones de corrupción y uso indebido de fondos públicos.
En 1992 Fujimori disolvió el Congreso, suspendió la constitución y envió tropas a la casa de García, quien fue advertido a tiempo. El expresidente huyó escalando una pared de su casa y pasó por los techos de cinco viviendas vecinas hasta llegar a una construcción donde se refugió hasta ser conducido a la embajada de Colombia, la cual garantizó su salida de Perú.
En su exilio compartió tiempo entre Colombia y París, donde su esposa y sus hijos residieron, hasta que en el año 2000 el gobierno de Fujimori se desmoronó en medio de escándalos de corrupción. García pudo retornar a Perú en 2001 luego que la justicia desestimó por falta de evidencias las acusaciones en su contra.
Tras su retorno, García entró de inmediato a la política a buscar el voto para un segundo período al admitir que cometió graves errores durante su primer mandato. Pero los votantes prefirieron apoyar a Alejandro Toledo.
Se postuló nuevamente a la presidencia para derrotar al nacionalista Ollanta Humala, con una propuesta de apertura al libre mercado y haciendo un mea culpa de sus errores durante su primer mandato. Asumió en julio de 2006 confiado en hacer mejor las cosas.
De inmediato anunció medidas para reducir el gasto público y recortó su salario al igual que el de los principales funcionarios del Estado, entre ellos los congresistas.
Su segunda gestión concluyó en 2011 con notables logros macroeconómicos los cuales después se vieron empañados por acusaciones de presunta corrupción ligadas a Odebrecht. El Producto Interno Bruto de Perú creció en promedio 7,2% durante su quinquenio impulsado por el alza mundial del precio de los metales, lo que permitió enfrentar sin problemas la crisis económica mundial de 2008.
PROBLEMAS CON LA LEY
El paso de Alan García por la política quedó marcado por acusaciones que llevaron a las autoridades a intentar detenerlo este miércoles por el supuesto delito de lavado de activos ligados a la constructora brasileña Odebrecht. Pero no fue posible. Murió tras dispararse en la cabeza en su dormitorio cuando la policía se disponía a arrestarlo.
Decenas de simpatizantes, amigos y varios políticos de su partido APRA que habían llegado al hospital reaccionaron con indignación y tristeza a la noticia de su muerte. Algunos entonaron el himno del grupo político que se fundó hace casi un siglo.