Porque esta declaración causó polémica y confusión entre amplios sectores del país
Andrés Manuel López Obrador, presidente electo de México, explicó ante medios de comunicación qué quiso decir cuando aseguró que México estaba en bancarrota y que por esta situación quizá no se podía cumplir todo lo demandado.
Incluso dejó en claro que desde su punto de vista, sí existe una crisis en el país que va más allá de lo económico.
"Salió el tema de la bancarrota y no les gustó la palabra, pero es eso, no me voy a quedar callado, sostengo que hay crisis en México y que hay mucha pobreza, abandono e inseguridad con violencia y que ha resultado un fracaso la política económica neoliberal y que la vamos a cambiar, no vamos a tener problemas porque el periodo neoliberal se caracterizó por la corrupción, son muy rateros, entonces eso fue lo que agravó la situación económica y social, la corrupción, eso ya no va a haber, esa variable ya no se va a presentar, ya no va a haber corrupción", concluyó AMLO.
AMLO consideró que la crisis de México no se mide solo en variables macroeconómicas, sino también en la pobreza, la inseguridad y la violencia que ve a diario en su recorrido por el país.
"Ahora que digo que está mal la situación, que hay una crisis en México, usé la palabra bancarrota, se me lanzan, interpretan que me estoy echando para atrás y no voy a cumplir los compromisos, falso, voy a cumplir todos mis compromisos, nada más quiero que se tenga conocimiento del punto de partida, no es ninguna justificación y vamos a salir adelante".
Las declaraciones las hizo durante una entrevista con medios de comunicación en el aeropuerto de La Paz, Baja California Sur, como parte de su gira de agradecimiento por el país.
El presidente electo de México dijo que el país lleva 30 años sin crecimiento, además de una deuda pública que creció de 1.7 billones de pesos en el sexenio de Vicente Fox a 10 billones de pesos con el gobierno de Enrique Peña Nieto.
"Yo tengo mis datos, ¿quién no ve la realidad? Llevamos 30 años sin crecimiento económico, creció la deuda pública, creció la pobreza, la violencia, entonces ¿ha estado muy bien el neoliberalismo, hay que aplaudirle? ¿por qué no aceptan que fue un fracaso la política neoliberal, que solo benefició a una pequeña minoría, empobreció a la mayoría del pueblo, produjo la violencia, por qué no aceptarlo, por qué no reconocerlo? No les pido que ofrezcan una disculpa sino que sean autocríticos, que acepten", dijo Andrés Manuel López Obrador.
Aseguró que pese a todo, cumplirá sus compromisos y hasta ofreció disculpas a los que sintieron su comentario como un agravio.
"Voy a cumplir todos mis compromisos, nada más quiero que se tenga conocimiento del punto de partida, no es ninguna justificación y vamos a salir adelante, pero ¿qué no estaban aplaudiendo la reforma energética? ¿qué no decían que este año íbamos a estar extrayendo 3 millones de barriles de petróleo diarios, que nos preparáramos para administrar la inversión extranjera que iba a llegar a México? Pero estamos produciendo petróleo cómo se hacía hace 40 años, y todavía se enojan, pues entonces si están enojados, ofrezco disculpas y amor y paz", dijo AMLO.
Las declaraciones del próximo presidente de México provocaron la reacción de la iniciativa privada.
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón aseguró México tiene retos muy grandes pero de ninguna manera está en bancarrota, pues el país nunca ha dejado de hacer frente a sus compromisos internacionales, y además tiene múltiples opciones para lograr crecer a un ritmo de 4%.
Mientras que Claudio X. González, presidente del Consejo de Administración de Kimberly Clark., dijo que el término ‘bancarrota’ para señalar los retos que enfrenta el país por parte del presidente electo, no fue el adecuado, pero deja ver una posición de advertencia sobre la dificultad para cumplir con todo lo prometido.
