El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció este viernes que envió a la Cámara de Diputados un proyecto de reforma para realizar una serie de cambios en materia energética que busca principalmente fortalecer la CFE, tener un mayor control sobre las tarifas eléctricas y concentrar la explotación de litio en manos del Estado.
AMLO descartó que la iniciativa represente la nacionalización o estatización del sector eléctrico y dijo que lo que se busca es “darle su lugar” a la CFE y tener un “control de los precios de los energéticos para que no se afecte la economía popular”, pero ¿qué dicen los expertos?
UN PASO PARA ATRÁS
Aunque López Obrador había insinuado gran parte del contenido del proyecto de ley, su eliminación de reguladores nominalmente independientes incluso provocó críticas de algunos de sus antiguos leales.
"La desaparición de la Comisión Nacional de Hidrocarburos es un paso atrás para la regulación del sector energético", dijo Martha Bárcena, ex embajadora en Estados Unidos, refiriéndose al regulador de la industria petrolera.
Además de eliminar la CNH, la ley también prevé deshacerse de la Comisión Reguladora de Energía (CRE). Los dos fueron creados hace años para ser reguladores de mercado imparciales.
Por su parte, Gabriela Siller, analista de Banco Base, dijo que la disposición del proyecto de ley que otorga a CFE el poder para cancelar contratos con proveedores de electricidad podría equivaler a una "herida autoinfligida", ya que la demanda de energía aumenta junto con la recuperación económica.
En tanto, la politóloga Denise Dresser indicó en un mensaje en redes sociales que la reforma es el “regreso a la estatización” y la vuelta a la monopolización de la CFE, lo que significa el rechazo a la innovación, “la mirada regresiva que no reconoce retos energéticos del mundo y el país”.
ATENTA CONTRA LA INVERSIÓN
La agencia calificadora Moody’s indicó que priorizar a la CFE afectará las inversiones y retrasará la transición energética de México.
“La propuesta de eliminar los reguladores energéticos reduce de manera manifiesta la transparencia de los costos y operación del sector, afectando con ello la confianza de los inversionistas y deteriorando en forma marcada el marco institucional”, comentó Roxana Muñoz, analista de Moody’s.
Según estimaron analistas, la iniciativa de reforma puede desalentar a las inversiones privadas en el sector energético.
“La iniciativa de reforma eléctrica desincentiva la inversión en energía renovable impidiendo que México cumpla sus metas de energía limpia”, dijo Adrián Garza, analista de Moody’s.
Los reguladores se fundaron como parte de las reformas de 2013 y 2014 que abrieron el sector petrolero de México a la inversión privada después de más de tres cuartos de siglo en el que la CFE y la petrolera estatal Petróleos Mexicanos tenían el monopolio.
“Sin lugar a dudas, esta iniciativa podría alterar el mercado”, dijo Rodolfo Rueda, socio líder de la práctica de relaciones regulatorias y gubernamentales en el bufete de abogados Holland & Knight LLP en la Ciudad de México. "Podría tener un impacto en la competencia", indicó a Bloomberg.
De esta forma, veremos cómo avanza (o no) el proyecto, pues Morena no cuenta con los votos suficientes en el Congreso, por lo que deberá buscar alianzas con otros partidos para lograr la aprobación.
CON INFORMACIÓN DE AGENCIAS
