El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) rechazó que el proyecto del Tren Maya ponga en riesgo o esté destruyendo zonas arqueológicas como afirmó el Washington Post en un reportaje que el propio gobierno de México calificó como "poco serio y profesional".
En un comunicado, el INAH dijo estar sorprendido con la "falta de ética y veracidad" del autor del texto, quien aseguró que el Tren Maya arrasó con varias casas y templos mayas milenarios durante los procesos de excavación en los tramos de la obra.
Además, precisó que el salvamento de piezas encontradas obedece a una metodología del INAH basada en estándares internacionales y no responde a una "orden" dictada por alguien, como se acusa en el texto.
"Descontextualiza, con mala intención, las declaraciones del responsable académico del salvamento arqueológico del Tren Maya, con el fin de presentarlo como el autor intelectual y material de la supuesta “destrucción”, apoyado en declaraciones anónimas o de personajes que se han dedicado a denostar el proyecto, sin conocerlo", añadió el INAH.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia dijo que México es un país tan vasto en vestigios de las culturas prehispánicas que en cualquier superficie del territorio nacional se pueden localizar restos arqueológicos, independientemente de la zona donde se realiza el Tren Maya.
Por último, el INAH agregó que el Washington Post incluyó "datos erróneos, imprecisos o mal interpretados, por utilizar términos equivocados, por falsear declaraciones, por omitir información relevante y, sobre todo, por revelar una posición parcial, tendenciosa y prejuiciada que, sin miramientos, descalifica el arduo trabajo realizado por profesionales de reconocida trayectoria y prestigio en su ámbito de conocimiento".