¡Ay no!
El presidente Andrés Manuel López Obrador, recordó cuando le dio un infarto por defender al petróleo mexicano, luego que un gobierno buscara privatizarlo y entregarlo a las grandes empresas.
"Me dio un infarto por eso, estábamos parando esa reforma de la privatización del petróleo, de la entrega de bloques de petróleo a empresas particulares para llevárselo todo", dijo.
En conferencia de prensa matutina, dijo que los contratos que se hacían violatorios a lo que se contempló con Adolfo Ruiz Cortines, con la Reforma al artículo 27 que decía que no se iban a permitir convenios porque decía convenios, no contratos.
Recordó que en un pasado se había perdido todo el litoral del golfo pero "de milagro nos salvamos porque unos años de haber cancelado ese convenio en el que se entregó esa parte del territorio con Díaz Ordaz, cuando estaba Jesús Reyes Heroles en Pemex, a los 5 años se encuentra el yacimiento de Cantarell y estaba en los contratos entregados a empresas extranjeras", detalló.
El presidente López Obrador revela que le dio un infarto cuando se aprobó la llamada "reforma energética" con la que se privatizó Pemex y se entregaron 110 contratos para repartir bloques de explotación, que eran violatorios de la Constitución pic.twitter.com/EnZVS3NzbV
— Nación321 (@Nacion321) February 16, 2023
También mencionó que cuando estaba por entrar a la presidencia, algunas de las personas que tenían estas concesiones le preguntaron que cómo le iba a hacer con lo que le dejaron: "porque en el caso del petróleo llegaron a quedarse con el 20% del potencial y el 80% restante no lo entregaron porque ya no seguimos con llamadas rondas y porque pude decir que no íbamos a seguir privatizando o entregando áreas petroleras porque desde las primeras reuniones les dije, inviertan, que produzcan, que desarrollen los campos que tienen y si invierten producen, desarrollan ya los campos petroleros que tiene entonces ya vemos la posibilidad de una nueva convocatoria nueva".
Sin embargo, tras tener esta charla, los empresarios decidieron no invertir, y se cancelaron los contratos que tenían. Dijo que mejor ya no iba a hablar más del tema: "no ya a ser que me acusen en la Casa Blanca", bromeó, pero concluyó esta parte diciendo que la corrupción es una pandemia, una peste y la posibilidad que tiene México de salir adelante depende de no permitir la corrupción como con Genaro García Luna.
