El presidente, Andrés Manuel López Obrador, felicitó al embajador de México en Perú, Pablo Monroy, por su labor durante la crisis política en aquel país y dijo que es un orgullo que se le haya declarado 'non grato' por hacer valer los derechos de México en el exterior.
"Es un timbre de orgullo que se se declare a nuestro embajador 'persona non grata' por defender una gran tradición mexicana, por hacer valer lo mejor de nuestra política exterior que es el derecho de asilo. Vamos a tener una reunión con el embajador y vamos a seguirle reconociendo por su gesto patriótico"
AMLO dijo que la visita de Monroy a Tabasco, "es su homenaje" y también reconoció que es un orgullo representar a México en una situación de conflicto y poner el alto el principio de asilo.
"Agradecer la destacada labor del embajador Pablo Monroy, es un timbre de orgullo representar a México en una situación de conflicto y poner en alto el principio del derecho de asilo, el que se proteja a quienes son perseguidos, a quienes corren peligro, que se les protejan sus derechos humanos. Esto ha caracterizado y es de lo que más se sabe de política exterior en México y el mundo, la actitud siempre consecuente de México de ofrecer protección y asilo en los distintos países del mundo, es una tradición que data de muchos años, su mejor época con el gobierno de Lázaro Cárdenas cuando se dio asilo a españoles u judíos y en los años 70 cuando se llevaron a cabo muchos golpes de Estado en América del Sur".
El embajador de México en Perú, Pablo Monroy, dijo que pese a su expulsión de aquél país por considerar que la actitud de México fue injerencista al darle asilo a la familia del expresidente, Pedro Castillo, se cumplieron los objetivos y relató cómo se vivieron los días posteriores a la crisis política peruana.
"Los retos que enfrentó la embajada no han sido fáciles pero hemos cumplido los objetivos principales, el primero es velar por los mexicanos en Perú, luego de los acontecimientos políticos desde el 7 de diciembre, se estuvo muy pendientes de los mexicanos turistas, residentes temporales y permanentes. Conforme a los protocolos, entramos en contacto con las personas que se vieron afectadas por el cierre de aeropuertos, bloqueos carreteros y suspensión de vuelos. Atendimos caso por caso".
Actualmente, dijo que más del 90% ya regresó a México o están en Lima en camino.
Durante la conferencia matutina, explicó que el segundo objetivo de la embajada fue honrar la larga tradición de asilo por parte de México para personas extranjeras que tengan temor por su vida, integridad o libertad.
"El presidente Castillo solicitó asilo y fue capturado antes de llegar a la embajada, pero pudimos resguardar a la familia. Ingresaron a la residencia oficial el 8 de diciembre y vinieron a México el 20 de diciembre, están sanos y salvos".
El tercer objetivo, dijo Monroy, era estar atentos al desarrollo de la situación política en Perú, mantener abiertos los canales de diálogo de modo que tuviéramos información confiable y esto lo transmitíamos al gobierno de México.
Logramos los objetivos apostando al diálogo, a la diplomacia, manifestando preocupaciones legítimas sin intervenir en las políticas internas. Confiamos en que en Perú se respeten y observen las normas de derechos humanos, que la actuación de autoridades sea apegada a dichos estándares, hay una preocupación sobre los procesos judiciales que se siguen en Perú, que se respeten los derechos procesales, en particular del presidente Castillo