Porque en la CDMX el maltrato animal está penado
Cuando crees que la gente no puede hacer cosas más crueles, te encuentras en redes sociales un video en el que se observa a un hombre asfixiando a un perro hasta desmayarlo.
De acuerdo con el periodista Eddy Warman, el nombre del entrenador de perros es Diego García Cirilo y los hechos ocurrieron en el Parque México, ubicado en la colonia Condesa de la Ciudad de México.
En la grabación se puede observar al perro inquieto y al entrenador ahorcándolo con la correa hasta que queda inconsciente.
#ImágenesFuertes Me llegó este video de un supuesto entrenador de perros de nombre Diego García Cirilo, que asfixia a un Husky hasta desmayarlo. Sucedió en el #ParqueMéxico en la Condesa, habría que investigar el caso para acabar con ese maltrato animal.@APASDEM pic.twitter.com/Zko2JMZkGb
— Eddy Warman (@EddyWarman) August 12, 2019
Un segundo video muestra al entrenador de perros ya con policías a su alrededor y quien narra la grabación asegura que la persona que hizo el primer video y presenció los hechos está dispuesta a denunciar al hombre y proceder contra él.
¡Lo agarrarón! #LordAhorcaPerros
— Eddy Warman (@EddyWarman) August 12, 2019
Diego García Cirilo el supuesto agresor del Husky en #ParqueMéxico, tengan cuidado en manos de quién dejan a sus mascotas, esperamos la denuncia proceda y no haya más casos como este. @Claudiashein @UCS https://t.co/A2L5zUIZRg pic.twitter.com/7MwgDKqQ2q
La unidad de contacto del secretario de Seguridad Ciudadana del Gobierno de la Ciudad de México, le escribió a Eddy para otorgarle el número de la Brigada de Vigilancia Animal.
Buenas tardes, agradecemos contactarnos al tel 52089898 Brigada de Vigilancia Animal, para brindarle la asesoría correspondiente para realizar la denuncia
— Unidad de Contacto del Secretario SSCCDMX (@UCS_GCDMX) August 12, 2019
Actualmente en la Ciudad de México se sanciona al maltrato animal ya sea por crueldad, imprudencia, omisión o negligencia con una pena de entre 6 meses y 2 años de prisión y una multa de entre 50 a 100 días, cuando las lesiones ponen en riesgo la vida del animal.