En los últimos días hay un evento que ha generado gran expectativa: el Cónclave que se realizará en el Vaticano, para la elección de un nuevo Papa, tras la muerte del Sumo Pontífice Francisco.
La curiosidad que genera este evento es tal que incluso hay quienes han recurrido a la película Cónclave, del director Edward Berger, para poder entenderlo.
Y si bien el film retrata cómo la elección está envuelta en secretismo y muestra puntualmente algunos detalles, como que a los cardenales se les prohíbe comunicar al mundo exterior lo que ocurrió durante la votación en el Cónclave, lo cierto es que no todo es cómo se vio en la pantalla grande.
Por ello, hoy te contamos cómo es este proceso, que se lleva a cabo detrás de las paredes con frescos de la Capilla Sixtina y que sucede cuando un papa muere o renuncia.
¿QUIÉN ESTÁ A CARGO?
Si un papa fallece, el camarlengo debe certificar la muerte y sellar el apartamento papal. Él mismo dirige las tareas administrativas y financieras de la Santa Sede hasta que asuma el liderazgo un nuevo papa.
El puesto principalmente ceremonial de camarlengo lo desempeña actualmente el cardenal Kevin Farrell, un estadounidense de origen irlandés que hoy lidera la oficina de laicos del Vaticano.
El decano del Colegio Cardenalicio convoca a los demás cardenales para el funeral del Papa fallecido, presidiendo la misa antes de que comience el Cónclave. Ese cargo lo ocupa actualmente el cardenal Giovanni Battista Re, jefe retirado de la oficina de obispos del Vaticano.
Después del funeral, hay nueve días de luto oficial, conocidos como “novendiali”.
Durante este tiempo, los cardenales llegan a Roma. Para que todos tengan tiempo suficiente para reunirse, el Cónclave debe comenzar entre 15 y 20 días después de que se declare la “sede vacante”, aunque puede comenzar antes si los cardenales están de acuerdo.
¿QUÉ SÍ Y QUÉ NO TIENEN EN COMÚN EL CÓNCLAVE REAL Y EL DE PELÍCULA?
Aunque los detalles que te hemos contado hasta ahora han sido muy bien retratados en el film, lo cierto es que para la elección del nuevo papa, este 2025, hay una situación atípica.
En esta ocasión, el Cónclave podría haber comenzado el 5 de mayo, pero los cardenales se dieron más tiempo y fijaron el 7 de mayo como la fecha de inicio para elegir al sucesor del Papa Francisco.
¿Cuál es la razón? Entre ellos no se conocen muy bien.
Vale la pena recordar que, por norma, sólo los cardenales menores de 80 años pueden votar y las regulaciones actuales limitan el número de electores a 120. Aunque según las últimas estadísticas actualizadas del Vaticano, había 135 cardenales menores de 80 años con derecho a voto.
En este contexto, los días ‘de más’ serán para conocerse entre sí, e incluso para hablar en sesiones más informales que incluyen a cardenales mayores de 80 años, quienes no podrán entrar en la Capilla Sixtina una vez que comience el Cónclave.
La idea es encontrar consenso sobre un candidato antes de recluirse en la Capilla Sixtina.
¿CÓMO SE REALIZA LA ELECCIÓN?
Una vez inaugurado el Cónclave, se lleva a cabo una primera votación en la Capilla Sixtina la tarde después de la misa inicial. Si no se elige ningún papa, durante los días siguientes se realizan dos votaciones cada mañana y dos cada tarde.
Como se muestra en la película, las papeletas son hojas de papel rectangulares con las palabras: “Eligo in Summum Pontificem” (“Elijo como sumo pontífice”) escritas en la parte superior, con un espacio para un nombre.
Cada cardenal hace su elección, dobla el papel por la mitad, camina hacia el frente de la capilla y declara: “Pongo por testigo a Cristo Señor, que será mi juez para que mi voto sea dado a quien ante Dios creo que debe ser elegido”.
Luego coloca la boleta en una bandeja y la vierte en un receptáculo.
Tres cardenales designados, conocidos como escrutadores, revisan cada boleta para ver si se llenó correctamente. Cada nombre se lee en voz alta y se cuenta, y los resultados se anuncian al Cónclave después de cada ronda.
Si nadie obtiene los dos tercios necesarios de los votos, las papeletas se perforan con una aguja e hilo, que luego se anuda y se coloca en una bandeja, y se prepara otra ronda de votación.
¿CUÁNDO ES QUE LOS CATÓLICOS TIENEN UN NUEVO PAPA?
Una vez perforadas las papeletas, se queman en una estufa cilíndrica al final de la sesión de votación. El humo negro de la chimenea de la Capilla Sixtina significa que no hay decisión. El humo blanco indica que los cardenales han elegido un papa y que éste ha aceptado.
Se agregan cartuchos químicos para garantizar que no haya confusión sobre el color. Para producir humo negro, se quema junto con las papeletas un cartucho que contiene perclorato de potasio, antraceno (el componente del alquitrán de hulla) y azufre. Para el humo blanco, se quema junto con las papeletas un cartucho de clorato de potasio, lactosa y resina de cloroformo.
También se repican campanas para señalar la elección de un papa con mayor claridad.
El nuevo papa es presentado desde la logia que da a la Plaza de San Pedro con las palabras: “¡Habemus Papam!” (en latín “¡Tenemos Papa!”) y el nombre papal elegido.
Luego emerge el nuevo papa y da su primera bendición.