Amerie Jo Garza, la niña que murió mientras llamaba al 911 por tiroteo en Texas

El ataque en una escuela de Texas dejó más de 20 muertos
El ataque en una escuela de Texas dejó más de 20 muertos
TexasEl ataque en una escuela de Texas dejó más de 20 muertos
AP
Nación321
2022-05-25 |11:19 Hrs.Actualización11:42 Hrs.


Amerie Jo Garza, una de las niñas asesinadas durante el tiroteo en Texas, intentó comunicarse al número de emergencias y fue en ese momento cuando fue agredida a balazos por Salvador Ramos, a quien las autoridades señalan como el atacante.

El diario Daily Beast contactó a la abuela de Amerie Jo Garza, quien describió a su nieta como una heroína que murió tratando de obtener ayuda para ella y sus compañeros de clase.

La niña de 10 años, según narró su familiar, era súper extrovertida y le gustaba acudir a la escuela, donde solía reportar buenas calificaciones. De hecho, horas antes del asesinato recibió un diploma por aparecer en el cuadro de honor en la escuela Robb Elementary en Uvalde, Texas.

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De acuerdo con las autoridades, el ataque se registró en la Escuela Primaria Robb en Uvalde, ubicada 135 kilómetros al oeste de San Antonio, y que tiene cerca de 600 alumnos.

En la institución estudian niños de entre siete y nueve años, de segundo a cuarto grado de primaria. El 90 por ciento de su comunidad es latina de bajos recursos, según datos de las escuelas de Texas. 

Unas horas después del tiroteo, la familia de Amerie intentó obtener información sobre ella pero no obtuvieron respuesta inmediatamente por lo que su padrastro, Ángel Garza, recurrió a Facebook. 

“No pido mucho o casi no publico aquí pero por favor. Han pasado 7 horas y todavía no he sabido nada de mi amor. Por favor Facebook ayúdame a encontrar a mi hija”, escribió.

El joven padre regresó a la red social por la noche para confirmar la muerte de Amerie y agradecer a quienes oraron por ella. 



La abuela de Amerie Jo Garza dijo al Daily Beast que recibieron la noticia de parte de un oficial que horas después del ataque confirmó que el cuerpo de la niña estaba en la oficina del médico forense.

“El pistolero entró y les dijo a los niños 'ustedes van a morir'. Y ella tenía su teléfono y llamó al 911. Y en lugar de agarrarlo y romperlo o quitárselo, él le disparó. Estaba sentada justo al lado de su mejor amiga. Su mejor amiga estaba cubierta de su sangre”, recordó la abuela.