Un alto funcionario brasileño que voló a Estados Unidos antes de los disturbios del fin de semana pasado debe regresar a más tardar en tres días o su país solicitará su extradición, dijo el ministro de Justicia de Brasil el viernes.
El Supremo Tribunal Federal emitió una orden de arresto para Anderson Torres, exjefe de seguridad del distrito federal, con relación al alzamiento del 8 de enero en la capital Brasilia, donde simpatizantes del expresidente Jair Bolsonaro allanaron el Congreso, el máximo tribunal y el palacio presidencial en un intento de revocar los resultados electorales.
El gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, que venció a Bolsonaro en las elecciones de octubre, investiga cualquier complicidad por parte de personas que pagaron para transportar a los agitadores a la capital y por personal de seguridad que pudo haberse hecho de la vista gorda y permitir que ocurriera el caos.
Su ministro de relaciones institucionales, Alexandre Padilha, dijo el jueves en Twitter que “el intento de golpe de Estado fue premeditado y bosquejado meticulosamente” y sus autores serán castigados.
Gran parte de la atención se ha centrado sobre Torres, exministro de Justicia de Bolsonaro, que se convirtió en el jefe de seguridad del distrito federal el 2 de enero y estaba en Estados Unidos el día que ocurrieron los disturbios. Alexandre de Moraes, ministro del Supremo Tribunal Federal, ordenó esta semana que Torres sea arrestado y ha abierto una investigación sobre sus actos, los cuales —dijo— se caracterizaron por la “negligencia y la colusión”.
"Todo el mundo sentado, se acabo la broma": momento en el que la policía toma el control del palacio presidencial de #Brasil. Vídeo vía @o_antagonista pic.twitter.com/OxoXGykQsC
— Víctor García Guerrero (@VictorGGuerrero) January 13, 2023
En su decisión, que fue dada a conocer el viernes, De Moraes dijo que Torres despidió a sus subordinados y salió del país antes de los disturbios, un indicio de que estaba preparando el terreno deliberadamente para la agitación.
Torres ha negado haber cometido delito alguno, y el 10 de enero declaró en Twitter que interrumpiría sus vacaciones para regresar a Brasil y presentar su defensa. Tres días después no lo ha hecho.
“Si para la semana próxima no se ha confirmado su presentación, desde luego que utilizaremos los mecanismos de cooperación internacional. Echaremos a andar procedimientos la próxima semana para llevar a cabo su extradición”, dijo el ministro de Justicia Flávio Dino.
El ministro hizo referencia a un documento que la policía federal brasileña halló tras registrar la vivienda de Torres: El borrador de un decreto por el cual se habría tomado el control de la autoridad electoral de Brasil y potencialmente revocado los comicios.
Se desconocen el origen y la autenticidad del documento no firmado, y no se sabe si Bolsonaro o sus subordinados hicieron algo para implementar la medida, la cual habría sido inconstitucional, según analistas y la academia brasileña de derecho electoral y político.
Pero el documento “figurará en la investigación policial, porque revela con mayor plenitud la existencia de una cadena de personas responsables de los hechos delictivos”, señaló Dino, añadiendo que Torres tendrá que informar a la policía quién lo redactó.