Porque el cambio climático derrite glaciares e intensifica los desastre naturales
Donald Trump ha sido polémico cuando se trata de cambio climático.
La comunidad científica (es decir, los que estudian y conocen estos temas) están de acuerdo con que el cambio climático es un serio problema. Pero a Trump eso no le ha importado y ahora, como presidente, firmó un decreto para que la Agencia de Protección Ambiental deje de aplicar las regulaciones climáticas.
Este martes el magnate firmó una orden ejecutiva que anulará, suspenderá o mandará a reevaluar numerosas medidas a fin de impulsar la producción energética nacional de combustibles fósiles. La medida contempla una reevaluación del "Plan de energía limpia", que limita las emisiones de gases invernadero en las plantas eléctricas que se alimentan del carbón.
"Es el inicio de una nueva era", comentó el presidente al firmar el decreto en la sede de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés).
Un funcionario de la Casa Blanca aseguró que la EPA debe concentrarse solo en tener aire y agua limpia. Para esta presidencia tener más empleos es más importante que cuidar el medio ambiente.
"Creo que el presidente ha sido muy claro en que no va a aplicar políticas de cambio climático que pongan a la economía de Estados Unidos en riesgo. Es muy simple", dijo a la cadena CNN el funcionario federal.
Durante la administración de Obama, fue desde la EPA en donde se aprobaron un conjunto de regulaciones para obligar a la industria energética a reducir la emisión de gases de efecto invernadero.
EL ENCARGADO DE PROTECCIÓN AMBIENTAL NO CREE EN EL CAMBIO CLIMÁTICO
Scott Pruitt fue elegido por Donald Trump para dirigir la Agencia de Protección Ambiental en esta administración. Sin embargo, Pruitt se define como “uno de los principales opositores a la agenda activista de la Agencia de Protección Ambiental”, agencia de la cual hoy es su titular.
En mayo de 2016 escribió en el National Review que "los científicos siguen en desacuerdo sobre el grado y el alcance del calentamiento global y su conexión con las actividades humanas".
El Environmental Research Letters publicó algo distinto: 97% de los científicos considera que el cambio climático es culpa de los humanos.
Además, según The New York Times, Pruitt ha trabajado para compañías de petróleo y gas y ha intentado frenar las normas creadas por el gobierno de Obama sobre la contaminación del aire, agua y la protección de animales en peligro de extinción.
EL CAMBIO CLIMÁTICO NO EXISTE PARA TRUMP
El problema con el cambio climático y la industria es que la quema de combustibles fósiles y la producción industrial humana afecta el medio ambiente y contribuye al aumento de la temperatura global.
Pero a Donald Trump no le importa mucho el medio ambiente. Incluso Trump ha negado que esto sea real, desde decir que los científicos nos están engañando, hasta culpar a China de "inventar" el concepto de calentamiento global para afectar la economía de Estados Unidos.
The concept of global warming was created by and for the Chinese in order to make U.S. manufacturing non-competitive.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 6 de noviembre de 2012
En Estados Unidos se ha hecho regulaciones paulatinas para que las empresas disminuyan sus emisiones de gases invernadero o sustituyan sus combustibles. Según Trump estas regulaciones han afectado a la decadente industria manufacturera. Actualmente hay iniciativas como el Protocolo de Kioto de la ONU para que los países reduzcan su emisión de gases invernaderos y con eso combatir el cambio climático y el calentamiento global.
LOS ESTADOUNIDENSES ESTÁN PREOCUPADOS POR EL CALENTAMIENTO GLOBAL
La casa encuestadora Gallup registra un número récord de ciudadanos preocupados sobre el calentamiento global en Estados Unidos, 50% de los estadounidenses ven en el calentamiento global un problema al considerar que "están preocupados" y " medianamente" preocupados.
Si bien los últimos 16 años la posición respecto al calentamiento global se había mantenido relativamente estable, en los últimos dos años la tendencia ha cambiado. En 2015 el 37% de los norteamericanos estaban preocupados por el calentamiento global y para 2016 aumentó a 47%. Además, la cifra de 2017, 50%, confirma la tendencia en el cambio de opinión de los estadounidenses. El mismo estudio de Gallup identifica que quienes más se preocupan por el calentamiento global son las mujeres, los demócratas y los jóvenes.
Esta encuesta fue realizada entre el 1 y el 5 de marzo de 2017 a mil 18 norteamericanos mayores de 18 años vía telefónica a nivel nacional. Cuenta con un margen de error de ±4% y un intervalo de confianza de 95%.
