La supuesta muerte del papa emérito Benedicto XVI, circuló en redes sociales y medios de comunicación de la cuenta de Twitter de Georg Bätzing, presidente de la Conferencia Episcopal Alemana; sin embargo, se trató de una cuenta falsa propiedad del periodista italiano Tommasso Debenedetti.
Una hora después de que se difundió la noticia e incluso se hizo tendencia en las redes sociales, en dicha cuenta se aclaró que esta era falsa.
Hasta el momento, la información sobre fallecimiento de quien se convirtió en el sumo pontífice número 265, no ha sido desmentida por El Vaticano.
Joseph Aloisius Ratzinger, su nombre original alemán, había renunciado como papa en 2013 con la intención de dedicarse a la oración y al retiro espiritual, mismo que fue sustituido por el papa Francisco, siendo el primer líder de la iglesia católica en renunciar a su puesto en siglos.
Esta nota se le atribuye al periodista italiano Tommasso Debenedetti, quien es conocido como el "asesino de celebridades". Entre sus víctimas, aparecen los Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa y Kazuo Ishiguro, el sempiterno candidato al Nobel luego de la muerte de Jorge Luis Borges, Haruki Murakami, y el polémico Michel Houellebecq.