El juicio en contra de Genaro García Luna llegó a su fin este martes luego de que fuera declarado culpable de al menos cinco cargos relacionados con narcotráfico, para llegar hasta el veredicto se requirió la participación de al menos 15 personas que subieron al estrado testificaron contra el 'superpolicía'.
Acusaciones por presuntos sobornos, uso de instalaciones para el trasiego de droga, compra de equipos para espionaje y hasta pactos con líderes del grupos criminales se escucharon a lo largo de 20 días.
Este es un recuento de los personajes que testificaron contra García Luna y sus polémicas declaraciones.
Jesús Zambada García, alias ‘El Rey', fue el testigo clave en el juicio contra Genaro García Luna y en sus primeras declaraciones contó a la corte de Brooklyn que, a finales de 2006, se organizaron dos reuniones con el exsecretario de Seguridad en un restaurante ubicado sobre Campos Eliseos, en la CDMX, y que le pagaron 5 millones de dólares en sobornos a cambio de su apoyo.
Según detalló el narcotraficante, todos estos tratos se dieron por intermediación de un abogado llamado Oscar Paredes. El dinero lo entregó en dos pagos, de tres y dos millones de dólares.
Como ya lo han dicho otros testigos en la corte, Zambada acusó que el apoyo del exsecretario de seguridad, durante el sexenio de Felipe Calderón, fue fundamental para la expansión del Cartel de Sinaloa.
Aseguró que Genaro García les permitía infiltrar sicarios en los operativos federales.
Sergio Villarreal Barragán, alias 'El Grande', lugarteniente de los Beltrán Leyva, se presentó como el primer testigo que habló en el juicio contra Genaro García Luna.
En la Corte de Nueva York acusó al exfuncionario de recibir sobornos del Cártel de Sinaloa. De acuerdo con su testimonio, “lo vio en varias reuniones” con narcos porque él era el encargado de entregar los sobornos.
“Con la ayuda del Gobierno, el cártel (de Sinaloa) creció en territorio, en la cantidad de droga que movíamos y eliminar a nuestros enemigos”, dijo en la audiencia.
En la segunda semana de alegatos Óscar Nava Valencia, alias 'El Lobo', aseguró que le pagó 10 millones de dólares al exsecretario de Seguridad federal, a cambio de protección y de liberar un cargamento de droga que estaba retenido en Manzanillo, Colima.
'El Lobo', declaró además que en 2006 contribuyó con 2.5 millones para una 'cooperacha' que varios capos del Cártel de Sinaloa hicieron para pagarle a García Luna, a cambio de protección e información.
En sus declaraciones también dijo que al grupo criminal le era importante asegurar el control del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), ya que era el principal punto de entrada de los narcóticos que traían de Colombia, Venezuela, Ecuador y a veces Bolivia.
El expolicía federal Francisco Cañedo Zavaleta afirmó haber visto al exsecretario de Seguridad Pública reunirse con Arturo Beltrán Leyva y a Édgar Valdez Villarreal, "La Barbie", en una carretera camino a Cuernavaca, Morelos.
“Me quedé temblando”, admitió Cañedo.
El exagente aseguró que compartió la información con la entonces diputada federal por Movimiento Ciudadano (MC), Layda Sansores, actual gobernadora de Campeche y que filtró la información a los medios de comunicación con detalles sobre el encuentro registrado en octubre de 2008.
“Vi varias camionetas varadas de mi lado izquierdo, en el sentido opuesto al que me dirigía. Bajé la velocidad de mi carrito. Quería ver de quiénes se trataba. Vi al señor Genaro García Luna con Arturo Beltrán y 'La Barbie', estaban platicando”, declaró ante el jurado.
El testigo dijo que, como represalia por denunciar a García Luna, fue detenido por sus superiores y acusado de seis delitos graves, pero un juez acabó por absolverlo.
El testigo Raúl Arellano Aguilera, un expolicía federal que estuvo asignado al Aeropuerto, narró cómo se dejaba introducir droga y mercancía ilegal en complicidad con agentes federales.
Arellano Aguilera contó que había un "grupo especial" de agentes de la entonces Policía Federal, que dejaba pasar la mercancía ilegal, bajo las órdenes de Ramón Pequeño y el entonces jefe de aeropuertos, Óscar Moreno.
El trasiego de la droga se daba cuando, por radio, se daba una orden denominada "45 por 32", que significaba que los agentes debían quedarse en sus posiciones, pero sin hacer detenciones ni inspecciones.
De acuerdo con su testimonio, esto sucedía frecuentemente en el AICM.
rturo Beltrán Leyva, uno de los capos más conocidos de México, tuvo secuestrado a Genaro García Luna cuando este era secretario de Seguridad del Gobierno federal, reveló Sergio Villarreal ‘El Grande’.
El capo explicó que el hecho ocurrió como consecuencia de una ‘guerra’ librada entre los Beltrán Leyva y la facción de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán e Israel ‘El Mayo’ Zambada, en 2008, reportó Keegan Hamilton, de Vice News.
‘El Grande’ dijo este martes que en medio del conflicto, Beltrán Leyva decidió secuestrar a García Luna para probar que “nada era imposible”. El exfuncionario terminó por ser liberado.
Héctor Villarreal Hernández, extesorero en el gobierno de Humberto Moreira en Coahuila, reveló también en el juicio contra Genaro García Luna que el exsecretario de Seguridad Pública ofreció la compra del programa espía Pegasus.
“Nos ofrecieron un servicio donde con un mensaje al celular se podía analizar llamadas y mensajes que se llamaba Pegasus”, expresó al asistir como testigo en el juicio.
El extesorero incluso afirmó que Moreira supo cómo funcionaba Pegasus porque el propio García Luna ordenó realizar una prueba en un Bunker de seguridad estatal que tenían en Coahuila.
Genaro García Luna buscó naturalizarse como ciudadano estadounidense, según reveló una oficial del servicio de migración en el juicio en su contra.
Marlene Tarantino, testigo que fue llamado por la Corte de Brooklyn exhibió la solicitud que envió el exfuncionario de Felipe Calderón, con fecha del primero de junio de 2018.
En ella, García Luna mencionó que nunca había cometido ningún delito en su vida por lo que sometía a consideración de las autoridades que le otorgaran la naturalización.
A pesar de negar haber cometido algún delito, los fiscales de Estados Unidos afirman que García Luna vivió en Miami, Florida, durante varios años con dinero que habría recibido de presuntos sobornos.
