El Ejército de Israel ordenó este 9 de octubre un asedio total a la Franja de Gaza, deteniendo la entrada de alimentos, combustible y suministros para sus 2.3 millones de habitantes mientras ataca el territorio gobernado por Hamas con oleadas de miles aéreos en represalia por la sangrienta incursión del fin de semana.
Más de dos días después de que Hamas lanzara su ataque sorpresa desde Gaza, el ejército de Israel dijo que recuperó en gran medida el control de sus ciudades del sur, donde había estado luchando contra los pistoleros del grupo.
Hamas tomó completamente por sorpresa al alardeado aparato militar y de inteligencia de Israel, lo que dio lugar a intensos combates en sus calles por primera vez en décadas.
Se desplegaron tanques y drones para vigilar las brechas en la valla fronteriza para evitar nuevas incursiones. Miles de israelíes fueron evacuados de más de una docena de ciudades cercanas a Gaza y el ejército convocó a 300 mil reservistas, una movilización masiva en poco tiempo.
Las medidas, junto con la declaración formal de guerra de Israel del 8 de octubre, muestran que Israel está cambiando cada vez más a la ofensiva contra Hamas, amenazando con una mayor destrucción en la densamente poblada y empobrecida Franja de Gaza.