La relación entre México y Estados Unidos ha tenido algunos tropiezos; el más reciente fue el secuestro de cuatro ciudadanos que provenían de Carolina del Sur y que fueron privados de la libertad en Matamoros, Tamaulipas. Pero este no ha sido el único caso que ha marcado una ruptura entre ambos países.
Aquí te presentamos los más polémicos.
1.- ASESINATO DE ENRIQUE 'KIKI' CAMARENA
El agente la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) llegó a México en 1981 como parte de una investigación para dar con los líderes del Cártel de Guadalajara.
Camarena logró infiltrarse en el grupo delictivo como agricultor y destacándose en el mismo, facilitando la seguridad en los estados del Pacífico mexicano.
Gracias a su labor, varios grupos delictivos se disolvieron y su identidad estaba aislada de los medios de comunicación.
Sin embargo, en 1984 tras la destrucción del plantío más grande de marihuana de 1000 hectáreas conocido como Rancho Búfalo, propiedad de Rafael Caro Quintero, el narcotraficante mandó buscar al agente para ordenar su secuestro.
El secuestro tuvo lugar el 8 de febrero de 1985, que fue realizado a plena luz del día por agentes de policía corruptos adscritos a la Dirección Federal de Seguridad gracias a la información facilitada por alguien de la propia DEA.
Camarena fue interrogado por los narcos y el agente de la CIA Félix Rodríguez y torturado durante las 36 horas de interrogatorio.
Le rompieron huesos, los dientes y lo quemaron. En un momento de los interrogatorios, que fueron grabados en cinta de audio, se llamó a un médico para que reanimara a Camarena cuando este se desmayaba, y poder seguir con las torturas y las preguntas.
Cuando finalmente entró en coma se le dio muerte golpeándole con una barra de acero en la cabeza. Su cuerpo fue encontrado el 5 de marzo en una zona rural de La Angostura, un pueblo en el estado de Michoacán.
La tortura y el asesinato de Camarena provocó una rápida reacción de la DEA y puso en marcha la 'Operación Leyenda' en la que una unidad especial fue enviada para coordinar la investigación en México, donde los funcionarios de alto nivel estaban implicados.
Los investigadores pronto identificaron a Miguel Ángel Félix Gallardo y sus dos colaboradores más cercanos: Ernesto Fonseca Carrillo y Rafael Caro Quintero, como los principales sospechosos en el secuestro. Bajo una enorme presión de los Estados Unidos sobre el gobierno del presidente de México, Miguel de la Madrid, Fonseca y Quintero fueron detenidos rápidamente.
En 1989, durante el primer año del gobierno del entonces presidente Carlos Salinas de Gortari, fueron detenidos el propio Félix Gallardo y el cuñado del expresidente Luis Echeverría Álvarez, Rubén Zuno Arce, quien fue acusado de la muerte de Camarena al descubrirse que era socio financiero del cartel de Guadalajara y, además, que la casa en la calle Lope de Vega en Guadalajara donde se torturó a Camarena, había sido de su propiedad.
Asimismo, fue también arrestado por cazarrecompensas pagados por la DEA e involucrado en este caso, el médico Humberto Álvarez Machain, quien fuera acusado en declaraciones de agentes de la Dirección Federal de Seguridad que participaron en el hecho, de prolongarle la vida a Camarena y a su piloto Alfredo Zavala Avelar por orden de Caro Quintero, para poder continuar torturándolos.
Actualmente, Caro Quintero se encuentra preso y en espera de que sea extraditado para cumplir su condena por el asesinato de agente de la CIA.
2.- HOMICIDIO DE AGENTE DE ICE, JAIME ZAPATA
Otro caso similar se dio en el 2011, cuando el agente del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), Jaime Zapata, quien cubría una misión especial en México, fue asesinado por 'Los Zetas', en una emboscada en San Luis Potosí.
En noviembre de 2010, personal agregado a la embajada de Estados Unidos en México solicitó a Washington equipo táctico especial para terminar una misión de alto perfil que sus agentes en territorio mexicano estaban desarrollando.
Las preocupaciones por el gran riesgo que implicaba llevar a cabo la misión para trasladar el equipo al entonces Distrito Federal por tierra, como se planeó, empezaron a brotar, pero fueron ignoradas por los tomadores de decisiones.
El agente especial Jaime Zapata y su compañero, Víctor Ávila, participarían en el trasiego del equipo táctico desde Estados Unidos atravesando tierra controlada por el narco en México.
El agente Ávila estaba asignado en México, mientras que Zapata se ofreció voluntariamente estando de paso en el país, para cumplir con otra misión de asignación de servicio temporal (TDY, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con las primeras investigaciones, el ataque se realizó en febrero de 2011, sobre la Carretera 57, en su tramo San Luis Potosí-Querétaro, aproximadamente a las 15:20 horas, a la altura del municipio de Santa María del Río, San Luis Potosí.
Fuentes cercanas revelaron que un grupo de sujetos armados que viajaba en, al menos, un vehículo realizó el ataque a la camioneta en la que se transportaban los oficiales y que portaba placas diplomáticas de Estados Unidos.
Para el gobierno estadunidense el ataque a los dos agentes "es contra todos aquellos que sirven a nuestra nación y ponen en riesgo su vida por nuestra seguridad”, dijo Janet Napolitano, secretaria de Seguridad Nacional (DHS por sus siglas en inglés).
Napolitano insistió en que todos los recursos de la DHS, están a la disposición del gobierno mexicano para investigar las circunstancias en las que se dio el ataque y expuso: “nos mantenemos comprometidos a dar el más amplio apoyo a los esfuerzos de México por combatir a la violencia dentro de sus fronteras”.
Por su parte, el entonces gobernador de San Luis Potosí, Fernando Toranzo, refirió que el ataque fue perpetrado por el crimen organizado, en concreto por Los Zetas, grupo criminal que tenía una gran presencia en dicha entidad.
Tras las investigaciones hechas por la entonces Procuraduría General de la República (PGR) y dl gobierno de Estados Unidos se logró la captura de dos integrantes de Los Zetas, quienes fueron condenados a cadena perpetua.
3.- CUATRO ESTADOUNIDENSES SECUESTRADOS
El pasado 3 de marzo, cuatro estadounidenses a bordo de una minivan, viajaron a Matamoros, Tamaulipas con la finalidad de someterse a una intervención quirúrgica.
Sin embargo, no correrían con buena suerte, pues al rebasar la frontera con México, fueron interceptados por un grupo de hombres armados, que abrieron fuego contra el vehículo antes de secuestrar a sus ocupantes.
Sus nombres son Latavia "Tay" McGee, su primo Shaeed Woodard, Eric James Williams y Zindell Brown.
Tras varios días desaparecidos, una operación conjunta de búsqueda entre México y Estados Unidos permitió rescatar con vida a McGee y Williams, mientras Woodard y Brown fueron hallados muertos.
Los cuerpos de los dos fallecidos están en proceso de ser repatriados a Estados Unidos. Latavia McGee resultó ilesa; Eric James Williams sufrió una herida de bala en la pierna, según el gobierno mexicano.
El grupo de amigos se dirigía a Matamoros, donde McGee, de 33 años, tenía cita en una clínica para someterse a una abdominoplastia o cirugía estética de reducción del abdomen, según la agencia de noticias AP.
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que este caso se exageró, ya que los medios estadounidenses señalan a México, especialmente a Tamaulipas como uno de los lugares más peligrosos por la presencia de grupos criminales.
En tanto, la administración de Joe Biden indicó que se trabajaría de manera conjunta con las autoridades mexicanas para combatir al crimen organizado.
Pero la oposición de EU insiste en que se califique a los cárteles como grupos terroristas.