La Cumbre de América del Norte, en la que estuvieron presentes el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha impulsado a las organizaciones en defensa del medio ambiente a pronunciarse en contra de la mineras de ambos países, sobre todo de las canadienses, de las que acusan que han hecho un saqueo de los recursos naturales del país.
Este el recuento de las protestas y exigencias de varias asociaciones civiles que están en contra de las empresas de dicho país.
De acuerdo con la dirección general de desarrollo minero de la Secretaría de Economía, en México operan 238 empresas con capital extranjero, de las cuales 153 son de Canadá, 32 de Estados Unidos, 14 de China y nueve de Australia.
La mineras canadienses poseen 60% del oro mexicano; sin embargo, no se limitan al oro, tiene presencia en la extracción de todos los tipos de metales, por ejemplo en la plata, metal del cual México es el mayor productor mundial.
En este sector, de las 10 minas más importantes del país, tres están en manos de canadienses: La Colorada, en Zacatecas, de Pan American Silver; San José en Oaxaca, de Fortuna Silver, y San Dimas en Durango, de First Majestic.
PROTESTAS
La protesta más reciente es la de la colectiva ¡Cambiémosla Ya!, que busca reformas profundas a la Ley Minera, pidió al Gobierno de México, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, aprovechar la Cumbre de Líderes de América del Norte, para “frenar el saqueo de empresas mineras, en particular las canadienses“, así como para modificar las condiciones en las que llevan a cabo sus actividades en el país, las cuales han provocado graves daños.
“Llama la colectiva ¡Cambiémosla Ya! a frenar el saqueo de empresas mineras, en particular las canadienses, que se han beneficiado del marco legal vigente en México, dejando graves daños en las regiones donde operan”, se lee en el comunicado que emitió a través de sus redes sociales.
Denunció que a partir de 1990, la minería en México se expandió aceleradamente. “Entre 1990 y 2018, la Secretaría de Economía entregó 46 mil 048 concesiones mineras, y hasta 2019 operaban mil 531 proyectos en el país. Estas concesiones abarcan una extensión similar a la del estado de Chihuahua”, estimó.
Consideró que la Ley Minera, publicada en 1992, en la antesala de la firma del entonces Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), “dio enormes facilidades y privilegios a las mineras”.
¡Cambiémosla Ya! puso como ejemplo “la operación sin restricción de empresas trasnacionales, entre las que destaca la presencia de corporaciones canadienses: de las 238 mineras que operan en el país, 153 son canadienses”.
“Esta nueva etapa de la minería en el país se caracteriza por la preponderancia de la extracción del oro y la plata, que se lleva a cabo en el 70% de las minas que operan en el país, 68% de las cuales son propiedad de corporaciones canadienses”, precisó.
De acuerdo con el conjunto de organizaciones y movimientos, “la mayor parte de estos proyectos mineros son tajos a ‘cielo abierto’, prohibidos en los llamados países desarrollados, pues generan deforestación, intensa sobreexplotación y contaminación del agua, así como del suelo y el aire, debido al uso de arsénico, cianuro, plomo, cadmio, sulfato de cobre e incluso mercurio”.
También acusó que “estos proyectos generan destrucción ambiental irreversible, dañan las economías locales y causan problemas de salud muy graves como daños dermatológicos y renales, distintos tipos de cáncer, afectaciones neurológicas y alteraciones en el desarrollo en niños, en especial los que van a nacer”.
Además, aseguró que esta destrucción se genera en zonas donde las y los habitantes viven en condiciones de pobreza y pobreza extrema, “quienes lejos de mejorar su situación económica y su calidad de vida, como reza el discurso empresarial que promueve la minería como motor del desarrollo, han visto cómo se profundiza su desigualdad y se generan problemas adicionales, entre ellos la ruptura del tejido social y los desplazamientos forzados”.
“En los 10 municipios mexicanos con la mayor producción de oro y plata los niveles de pobreza y pobreza extrema son mayores que los del promedio del país. A ello se suma la violencia que se ha extendido en muchas regiones mineras y los asesinatos de defensores ambientales, presentes en regiones como Mazapil, Zac., y Valles Centrales, Oax., entre otros, donde las mineras canadienses han impuesto condiciones de terror”, afirmó la colectiva.
Temixco, Morelos
Pueblos nahuas de Morelos se unieron a la protesta en contra de la entrada de la empresa canadiense Alamos Gold en el municipio de Temixco con la intención de explotar oro y plata a tajo abierto.
Durante la manifestación, los integrantes de los 16 pueblos y colonias nahuas exigieron al municipio declarar su territorio libre de minería y a la Semarnat rechazar la entrada de la minera.
En este sentido, la Semarnat indicó que en esa entidad, las concesiones mineras “Esperanza I” y “Esperanza II”, de la empresa Esperanza Silver de México, subsidiaria de la canadiense Alamos Gold Inc., abarca superficies de los municipios de Temixco, Xochitepec, Miacatlán, Emiliano Zapata y Coatetelco, donde sus actividades ponen en riesgo la salud humana y ambiental para al menos unas 200 mil personas.
En junio del año pasado, el gobierno de Morelos aseguró que la empresa no avaló el Manifiesto de Impacto Ambiental, por lo que prohibió sus operaciones.
Oaxaca
En 2021, a tres años de que la Minera Cuzcatlán, filial de la canadiense Fortuna Silver Mines ubicada en San José del Progreso, Oaxaca, derramara desechos tóxicos de su presa de jales en el río Coyote, clausuraron el 8 de octubre el evento denominado “Encuentros Indígenas Canadá – México”, impulsado por la Embajada de Canadá en México. Colectivas, pueblos y comunidades indígenas se manifestaron en el Jardín el Pañuelito, del Centro Histórico de la capital de Oaxaca, para expresar su rechazo ante el supuesto hermanamiento entre ambas naciones.
Así lo expresaron manifestantes y habitantes de comunidades afectadas por la minería canadiense en Oaxaca que acudieron a la convocatoria que circuló días antes. En el documento se puede leer que “la titular de la Secretaría de los Pueblos Indígenas y Afroamericanos (SEPIA) mencionó que en esta celebración no se tocará el tema de la minería. (…) Las comunidades y colectivas afectadas por proyectos mineros y con concesiones adjudicadas a empresas canadienses, consideramos de vital importancia posicionar el tema de la minería en la discusión pública”.
En el sur de México, el crecimiento de movimientos en contra de las minerías en Oaxaca, donde en una comunidad indígena los lideres han sido asesinados y los pobladores divididos desde el comienzo de las operaciones mineras.
Las compañías y sus defensores han prometido empleos y desarrollo económico. Pero las comunidades afectadas dicen que mas personas han perdido sus empleos y su forma de vida debido a las consecuencias económicas y el impacto negativo ambiental.
ABUSOS
Por otra parte, ¡Cambiémosla Ya! recordó que las mineras canadienses en México se “especializan” en la extracción de oro y que “diversos especialistas han estimado que, durante los pasados 20 años, se ha extraído de México cinco veces más oro que el que se extrajo durante los 300 años del periodo colonial”.
“Más que ningún otro país, Canadá se ha beneficiado de la aurificación de la minería en el país. Las enormes ganancias de esta explotación no se reportan cabalmente a las autoridades mexicanas y contrastan con su ínfima contribución al bien público: escasos empleos y reducidos impuestos”, denunció.
Ejemplificó que, “en el año 2019, los ingresos fiscales de la extracción de minerales metálicos y no metálicos representaron apenas el 0.13% de la recaudación total del Gobierno federal por actividad económica; para 2020 la minería aportó 0.32%; para 2021 0.97%”.