Moderna parecía ser una empresa poco rentable, pues no tenía productos para comercializar y no había tenido oportunidad de poner a prueba su tecnología.
No se sabía con certeza si la tecnología de Moderna sería suficiente para pasar la prueba en el ensayo Fase III de la vacuna COVID basada en ARNm. No obstante, este año podría entregar mil millones de dosis de su vacuna COVID y generar 19 mil millones de dólares de ingresos, informa Bloomberg News.
Su valor de mercado alcanzó los 100 mil millones de dólares por primera vez este 14 de julio y con él supera al de firmas como Bayer AG, quien inventó la aspirina, así como de empresas de biotecnología como Biogen Inc., fundada tres décadas atrás.
Se indica que la velocidad con la que Moderna y su principal competidor de ARNm, que es la asociación entre Pfizer y BioNTech idearon sus vacunas es lo que ha contribuido a la lucha para que la pandemia termine.
Con este antecedente, Stéphane Bancel, director ejecutivo de Moderna ha prometido que si las vacunas de ARN mensajero funcionan, esto conducirá a otra industria que estaba pendiente, que es poder tratar enfermedades cardíacas, cáncer y afecciones genéticas raras, y hasta VIH.
“Vamos a interrumpir totalmente el mercado de las vacunas!, dijo durante una entrevista a fines de mayo en la sede de Moderna en Cambridge, Massachusetts.
La compañía tendría vacunas para 10 virus que están en ensayos humanos. Estos incluyen refuerzos para Covid, gripes estacionales, vacunas contra VIH, enfermedades relacionadas en fetos como citomegalovirus, entre otros.
El concepto detrás de las vacunas de ARNm es simple. Cuando las inyecciones llevan esas instrucciones de producción de proteínas a las células, las convierten efectivamente en fábricas de vacunas microscópicas por derecho propio. Esto permite a los desarrolladores optimizar lo que normalmente es un proceso de fabricación complicado.