Zúrich.— La FIFA ratificó oficialmente a Arabia Saudí como sede de la Copa del Mundo de fútbol de 2034, y confirmó que España, Portugal, Marruecos, Uruguay, Argentina y Paraguay serán coanfitriones en 2030.
La candidatura saudí fue la única. Su ratificación fue aplaudida por más de 200 federaciones integrantes de la FIFA. Participaron de forma remota en una reunión en línea organizada en Zúrich el miércoles por el presidente del organismo rector del fútbol, Gianni Infantino.
“Esta votación del Congreso es fuerte y clara”, consideró Infantino, quien había pedido a los dirigentes futbolísticos que levantaran las manos a la atura de la cabeza para aplaudir y mostrar así su apoyo a la candidatura —sus imágenes aparecieron en pantallas.
La decisión se combinó con la aprobación de la única candidatura para albergar la Copa del Mundo de 2030. España, Portugal y Marruecos serán coanfitriones en un proyecto de seis naciones, en el que Argentina, Paraguay y Uruguay albergarán un partido cada uno.
En total, ese certamen constará de 104 encuentros.
La conexión sudamericana marcará el centenario del primer Mundial, realizado en 1930 en Uruguay.
Reunidos en la sede de CONMEBOL en Paraguay para participar de manera virtual del Congreso de FIFA, los coorganizadores sudamericanos celebraron su confirmación como sede.
“Se decidió honrar la historia. El Mundial vuelve a su casa. Estamos en la casa, en el continente que tuvo su primer Mundial. El primer Mundial se jugó en Uruguay con la primera nación campeona del mundo y ahora también tenemos al último campeón del mundo que es Argentina”, expresó el titular de la entidad, Alejandro Domínguez.
Claudio Tapia, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), hizo también mención a la tradición y éxitos de su país en este deporte.
“Muchísimas gracias a los campeones del mundo del 78, 86, 22. En nombre de los campeones agradecerles la oportunidad de poder ser sede. Los esperamos en 2030 en la tierra de Di Stéfano, de Diego Maradona y de Lionel Messi”, expresó.
Para 2034, la FIFA otorgó al adinerado reino petrolero su mayor premio hasta la fecha tras el masivo gasto en deportes de repercusión global impulsado por el príncipe heredero, Mohammed bin Salman.
La decisión completa un proceso de candidatura de 15 meses en su mayoría opaco que Infantino, ayudó a dirigir hacia Arabia Saudí sin la competencia de otro candidato, sin responder preguntas y que, según grupos de derechos humanos, pondrá en riesgo la vida de los trabajadores migrantes.
El órgano rector del fútbol mundial y las autoridades saudíes dicen que albergar el torneo de 2034 puede acelerar un cambio, incluyendo más libertades y derechos para las mujeres.
El camino para la victoria saudí se despejó el año pasado cuando la FIFA aceptó un plan para organizar el Mundial de 2030 en tres continentes.
Introducing the hosts for the next two editions of the @FIFAWorldCup! 🏆
— FIFA (@FIFAcom) December 11, 2024
Morocco, Portugal and Spain will host in 2030, with centenary celebration matches in Argentina, Paraguay and Uruguay.
Four years later, Saudi Arabia will host the FIFA World Cup 2034™. pic.twitter.com/WdOEdNEVxH
Aquella decisión implicó que sólo las federaciones de Asia y Oceanía eran elegibles para organizar el Mundial de 2034, y la FIFA les dio menos de cuatro semanas para lanzar su candidatura. Sólo Arabia Saudí lo hizo.
Se iniciará una década de escrutinio sobre las leyes laborales saudíes y el trato a los trabajadores, en su mayoría procedentes del sur de Asia, que son necesarios para ayudar a construir y mejorar 15 estadios, además de hoteles y redes de transporte antes del torneo de 104 partidos.
Grupos de derechos saudíes e internacionales y activistas advirtieron a la FIFA que no ha aprendido las lecciones de los criticados preparativos de Qatar para albergar el Mundial de 2022.
La FIFA tomó una “decisión negligente” al aprobar a Arabia Saudí sin recibir garantías públicas de protección a los derechos humanos, indicó en un comunicado un colectivo internacional de organizaciones humanitarias.