Una decena de senadores republicanos y demócratas de Estados Unidos enviaron una misiva dirigida al presidente Joe Biden en la que le externaron su preocupación por lo que llamaron una “retórica antiempresarial” del mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
Los legisladores señalaron que el Gobierno de México ha llevado a cabo una serie de “ataques y violaciones” al Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), por lo que le piden a Biden actuar en consecuencia.
Lo anterior, refiere la misiva, en relación con la suspensión de actividades de la minera estadounidense Vulcan, propietaria de Calica, cuya concesión en Playa del Carmen fue suspendida a principios de este mes por órdenes del Gobierno de México.
“Vulcan Materials Company no es la única entidad estadounidense que sufre acoso del gobierno mexicano y expresamos nuestra preocupación por la actitud y la retórica antiempresarial del presidente López Obrador. Ha habido una serie de casos sorprendentes, particularmente en la energía donde múltiples instalaciones de propiedad estadounidense se han visto obligadas a cerrar”, refiere el documento en poder de El Financiero.
La carta detalla que, por más de 30 años, Vulcan Materials Company, propietaria de la minera Calizas Industriales del Carmen (Calica), operó una concesión para extraer piedra caliza en Quintana Roo.
Sin embargo en 2018, Vulcan inició un procedimiento de arbitraje internacional en contra de México, cuyo Gobierno prohibió la operación en dos de los tres yacimientos que posee la empresa estadounidense.
“En enero de este año, el presidente López Obrador comenzó una escalada de hostilidades, interfiriendo directamente con la capacidad de Vulcan para exportar materiales y haciendo públicos numerosos declaraciones que abogan por que Vulcan deje de extraer”, refiere la misiva.
Esto, en referencia a que el pasado 5 de mayo, el Gobierno de México presentó a la empresa las órdenes de cierre para cesar de inmediato todas las actividades de extracción y explotación de canteras en el único yacimiento activo que tenía la minera en Playa de Carmen, Quintana Roo.