Porque en Estados Unidos regresó el debate sobre el acceso a las armas que tiene cualquier ciudadano norteamericano
En medio de la tragedia por el tiroteo en El Paso, Texas, el espíritu mexicano se hizo presente al ritmo de mariachi.
El sábado, un supremacista blanco de nombre Patrick Crusius abrió fuego en contra de los clientes de un Walmart ubicado en El Paso, frontera con Ciudad Juárez, Chihuahua. El tiroteo dejó 22 personas muertas (entre ellas 8 mexicanos), y docenas de heridos.
Por tal motivo este martes cientos de personas se reunieron en Ponder Park, a unos metros del Walmart donde ocurrió la tragedia, para rendir homenaje a las víctimas.
Fue en este homenaje que un mariachi entonó la emblemática canción Amor Eterno, de Juan Gabriel. El Divo de Juárez comenzó su carrera artística muy cerca de dónde ocurrió el tiroteo del sábado.
BBC grabó el momento emotivo en el que decenas de personas se unieron al mariachi para cantar Amor Eterno.
If you come from a Mexican family, you know this song. It's usually sung at funerals as a last good bye. It ends with the promise that one day we will reunite.
— Angélica María Casas (@AngelicaMCasas) August 5, 2019
Today, #ElPaso sang it to the 20 victims of Saturday's massacre. #AmorEterno pic.twitter.com/EUACgnqIsl
El New York Times también reportó este momento en el que la música le hizo un homenaje a las víctimas del tiroteo:
"Amor Eterno," a ballad about unforgettable, eternal love, is a widely recognized song of mourning in Mexican culture. In the wake of the El Paso mass shooting, it has become a heartbreaking anthem. https://t.co/fGImYBydUT
— The New York Times (@nytimes) August 7, 2019
En un manifiesto publicado el sábado, el responsable del tiroteo en El paso, Patrick Crusius, arremetió contra los peligros de la inmigración en masa y advertía que a la larga los hispanos se apoderarán de la economía y el gobierno.
El autor argumentó que atacar objetivos de “baja seguridad” era una manera de “luchar para recuperar a mi país de la destrucción”. El joven agregó que no era un supremacista blanco, aunque admitió que los medios de comunicación lo iban a catalogar como tal.