Las elecciones que llevó a cabo Morena el pasado fin de semana para elegir a su Congreso Nacional nos dieron una demostración de la vida partidaria en el país actualmente, con sus buenas y malas. Creo que también marcan un buen momento para hacer un corte de caja acerca los seguidores de ese partido político, el electorado morenista. ¿Cuántos son, quiénes son y cómo han variado en los últimos años?
Para ese propósito, recurro a las encuestas realizadas por El Financiero, de 2019 a 2022, que han acumulado una cantidad considerable de entrevistas, 42,098, lo cual nos permite hacer una radiografía muy detallada del electorado, incluidos los morenistas, que promedian una cuarta parte del electorado nacional en esos años.
Pero no siempre ha sido así. Morena se fundó en 2014 y para 2015 ya contaba con 9 por ciento de seguidores a nivel nacional, considerando los promedios anuales de diversas encuestas realizadas en ese año. Las y los morenistas aumentaron gradualmente a 14 por ciento en 2018, año de las elecciones presidenciales, y prácticamente se duplicaron en porcentaje a 27 por ciento en 2019, el primer año de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, y, hasta ahora, su pico máximo anual.
No es la primera vez que el partido ganador se beneficia de nuevas adhesiones entre la ciudadanía tras una elección presidencial; lo vimos con el PAN en 2001 y un poco en 2007, y también un poco con el PRI en 2013, pero el brinco de Morena ha sido el más grande hasta ahora.
Desde el año 2001, también hemos visto un desgaste del partido gobernante durante el periodo de gobierno, y en eso Morena no es la excepción. En 2020 se registró una baja de cuatro puntos, a 23 por ciento de seguidores a nivel nacional, en promedio anual; luego se recuperó a 26 por ciento en 2021, y en lo que va de 2022 bajó a 22 por ciento, este último en promedio semestral.
La tendencia de Morena es a la baja: de 2019 a la primera mitad de 2022, el partido ha perdido cinco puntos porcentuales; es decir, casi una quinta parte de los seguidores que tenía en 2019.
A pesar de esta recaída, Morena sigue siendo el partido con más seguidores en el país, superando a PAN, PRI y PRD, que, juntos, suman 20 por ciento. Más de la mitad del electorado nacional es hoy en día apartidista.
La baja más notable de Morena es entre los electores jóvenes, entre 18 y 29 años de edad, donde la caída es de ocho puntos, de 24 a 16 por ciento entre 2019 y 2022. También bajó seis puntos en el segmento de 30 a 49 años (de 24 a 18%), pero apenas dos puntos entre el segmento de 50 años o más (de 35 a 33%). Como ya hemos señalado en otras ocasiones, actualmente Morena atrae más a los mayores de edad que a jóvenes.
La región más morenista del país es el sur, y ahí la disminución de morenistas ha sido de apenas tres puntos. En el norte ha bajado cuatro puntos; en el centro, seis puntos, y en la región centro-occidente, siete puntos.
Considerando a las poco más de 11 mil personas entrevistadas en estos tres años y medio que se identifican como morenistas, hagamos una clasificación. Por un lado están los ideológicos, que son morenistas de izquierda; por otro, los clientelares, que son morenistas que reciben beneficios de programas sociales, ya sea directamente o sus familiares cercanos, y una intersección entre ambos, tanto ideológicos como clientelares.
Los ideológicos suman 22 por ciento del total de morenistas; los clientelares, 23 por ciento, y la combinación de ideológicos y clientelares, otro 23 por ciento. Muy parejos.
Una cuarta categoría de morenistas que no son ideológicos ni clientelares la forman aquellos que están menos convencidos de la 4T, pero aun así se identifican como morenistas, acaso por estar con el partido ganador. Ese grupo representa 32 por ciento restante y son, al parecer, los menos sólidos.
Finalmente, no hay que olvidar que la gran mayoría de morenistas en el país es, antes que nada, lopezobradorista. Del total de morenistas entrevistados entre 2019 y 2022, 32 por ciento se afirmó como morenista en una segunda pregunta, mientras que 68 por ciento dijo ser más lopezobradorista que morenista. Así el electorado del hoy partido gobernante.
